DEBATES Y ENTREVISTAS

‘Si Me Dicen No Vengo’, a 16 días de la elección presidencial

Los voceros de Ricardo Anaya, José Antonio Meade y Andrés Manuel López Obrador hablaron sobre el tercer debate, el caso Odebrecht y las adjudicaciones a Riobóo, a 16 días de la elección presidencial en “Si Me Dicen No Vengo”, conducido por Joaquín López-Dóriga, por FOROtv.

Marcelo Torres, vocero de Ricardo Anaya, aseguró que el tercer debate realizado en Mérida, Yucatán, fue un ejercicio digno de reconocer por el trabajo del Instituto Nacional Electoral (INE), sin embargo, señaló que fue complejo y limitado en tiempo. Afirmó que el candidato de la coalición “Por México al Frente” fue combativo y con ideas profundas y que Andrés Manuel fue perdido y temeroso.

Jesús Ramírez, vocero de López Obrador, destacó que el formato ayudó, que los candidatos del PRI y del Frente “mostraron desesperación” y que Andrés Manuel se vio con solidez y propuesta.

Armando Ríos Piter, vocero de José Antonio Meade, dijo estar convencido de que el candidato de la coalición “Todos por México”, tuvo muy buen desempeño y demostró ser alguien que tiene experiencia, preparación y planteamientos muy concretos. Destacó que en el tema de salud lo resolvió muy bien y en el medioambiente se mostró muy sólido. “Se veía como un jefe de Estado, mientras que los otros estuvieron agrediéndose”.

Jorge Triana, vocero de Ricardo Anaya, subrayó que se cayó el mito de la pureza moral y de superioridad de López Obrador. “Se destapó una cloaca con los contratos que le dio a José María Riobóo. No han podido responder. Este caso tiene mucha cola, nadie puede darse baños de pureza a partir del debate”, subrayó.

Javier Lozano, vocero de Meade, aseveró que en este tercer debate se avanzó mucho e incluso que hubo cosas que se perfeccionaron. “Meade se vio muy preparado, sólido, haciendo propuestas serias. Coincido con Marcelo, López Obrador no aterrizaba ni una idea”.

Lozano sostuvo que se trató de la peor presentación de López Obrador y en cambio, la mejor de Meade.

Mario Delgado, vocero del candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, expuso que con este tercer debate se completó el ciclo y fue donde más información se dio.

“Me gustó Andrés Manuel, estuvo tranquilo y lo vi muy presidencial”, agregó.

Jorge Triana no coincidió y dijo: “Yo creo que vimos un Andrés Manuel descuadrado, porque se le acorraló y se le cuestionó si le había adjudicado contratos a Riobóo y su respuesta fue no. Se le cayó el teatrito, y mintió en cadena nacional y eso es lo que nos espera, un gobierno mentiroso si llega a presidente”.

Ríos Piter destacó que algo interesante en el debate fue que salió el nombre del secretario de Comunicaciones y Transportes que propondría Andrés Manuel de llegar a presidente: Javier Jiménez Espriú.

“Es interésate que tenga que ver con Odebrecht”, añadió

Marcelo Torres sostuvo que Andrés Manuel sí miente y sí es corrupto. “Sí dio las adjudicaciones a Riobóo. Ese es el verdadero López Obrador, doble cara, estafador y hay más”.

“Lo malo es haberlo negado y al día siguiente sale con que no hubo nada ilegal”, indicó Javier Lozano.

Mario Delgado reviró los señalamientos y aseguró: “Todo esto es un truquito”. Apuntó que la Ley de Obras Publicas dice que se puede contratar de manera directa y que si se contrató a José María Riobóo para la construcción del segundo piso del Periférico en la Ciudad de México fue porque cuenta con la patente de las ballenas.

Jesús Ramírez recordó que en todos los países de América Latina han caído presidentes y funcionarios y en México no se ha tocado a ningún funcionario por Odebrecht.

Mario Delgado señaló que el pacto del PRIAN se llama corrupción y se apellida Odebrecht.

Ríos Piter le respondió a Mario Delgado que quien está metido en este caso es Jiménez Espriú y toda su familia. “Quienes tienen que explicar todo lo que hizo Odebrecht son ustedes”, sostuvo.

Delgado argumentó que Jiménez Espriú solo es una propuesta y que el problema en realidad son los actos de corrupción firmados por el PRI y el PAN.

“Hay toda una familia relacionada con Morena. ¿Por qué no hablar de la relación?, cuestionó Ríos Piter.

“Lo que sí quedó evidenciado es que toda esa pureza moral que presume López Obrador se desplomó en dos casos”, reiteró Javier Lozano. “La hipocresía es que en tu proyecto de nación”, añadió.

“Quedó como mentiroso, estafador y corrupto, no sabía ni donde esconderse y fue a señalamiento de Ricardo Anaya”, insistió Marcelo Torres.

Ríos Piter recalcó que, en cuento a educación, el planteamiento de López Obrador es muy limitado. “Y lo dijo, voy a echar para atrás la reforma educativa”.

Mario Delgado defendió que López fue muy claro a señalar que el espíritu sancionador a los maestros tiene que eliminarse.

“Dijo claramente que la iba a echar para atrás”, recordó Lozano.

Ríos Piter señaló que los liderazgos sindicales tienen un acuerdo político. “Hay que decirlo, es volver con Elba Esther Gordillo”.

Para concluir, Jorge Triana hizo mención de lo que el hijo de Andrés Manuel López Obrador, José Ramón López Beltrán, le dijo a Ricardo Anaya en el aeropuerto de Mérida. “Le llamó cerdo”, aseguró.

Jesús Ramírez afirmó que el interés de López Obrador es fortalecer los derechos sociales.

Armando Ríos Piter reiteró que Meade supo dar certidumbre.

Marcelo Torres recordó que López Obrador está dispuesto a aliarse “con quien sea”.

Mario Delgado aseguró que López Obrador va muy bien.

Por último, Javier Lozano destacó que Meade va a ganar, a la buena.

 

Con información de “Si Me Dicen No Vengo”.

 

LLH/RMT