CLIMA Y FENóMENOS NATURALES

Sepultan a policía de Juchitán, víctima del sismo de 8.2 grados

Música de banda acompañó el sepelio del policía Juan Jiménez Regalado, fallecido entre los escombros del Palacio Municipal de Juchitán, Oaxaca, destruido parcialmente por el sismo de 8.2 grados del jueves 7 de septiembre.

Fue un recorrido de poco más de tres kilómetros, desde su casa, donde fue velado toda la noche, hacia el panteón.

Para sus deudos, sus tres hijos y su viuda, el dolor parecía aumentar conforme avanzaba el cortejo formado por familiares, amigos y elementos de la Policía Municipal de Juchitán.

En el trayecto hubo una parada frente a la casa de su madre, la casa donde Juan nació. Fue el único momento en que la música cesó.

El féretro del policía Jiménez Regalado pasó por las calles marcadas por los efectos del sismo: Casas destruidas o con severos daños.

Después de una hora de recorrido, la carroza llegó al panteón “Miércoles Santo”.

Antes de que el féretro fuera depositado en la tumba, los compañeros de Juan Jiménez le dieron el último adiós.

Finalmente, el ataúd fue colocado en la fosa y sobre él, acomodaron el uniforme de policía de Juan Jiménez, su gorra, fornitura y tolete.

“Un puño de tierra” fue la última melodía que tocó la banda de música para despedir al policía Juan Jiménez Regalado, sepultado a la entrada del panteón, víctima del terremoto que estremeció a México.

Con información de Arturo Cerda

LHE