Amigos y familiares, despidieron, la tarde del martes 20 de octubre de 2020, a Ayelin Iczae, de 13 años de edad, localizada sin vida la mañana del lunes, en el municipio de Tixtla, Guerrero.
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Unas 400 personas acompañaron el cortejo fúnebre hasta el panteón El Tepeyac, donde fue sepultada.
El jueves pasado Ayelin salió de su casa para reunirse con su mamá en su negocio de reciclaje de plástico, ubicado en la colonia 6 de Noviembre, cerca de la carretera federal Tlapa-Chilpancingo.
Según los familiares, la menor caminó por una brecha de la barranca Chichipico, para llegar con su mamá, pero en algún punto del camino desapareció.
“La niña llevaba una blusa negra, unos pants color gris oscuro y sus tenis blancos. El día jueves, a las 4 de la tarde, yo le llamé y le dije que bajara al lugar donde yo la estaba esperando, que ahí me esperara, que yo iba a ir a otro mandado. Pero que ella ahí llegara”, recordó Flora Marcelo Rojas, su mamá.
Desde la noche del jueves sus familiares comenzaron su búsqueda.
El viernes, sábado y domingo, se sumaron más personas, vecinos, estudiantes de Ayotzinapa, bomberos del municipio, policías y elementos de Protección Civil con ayuda de binomios caninos.
El sábado familiares de Ayelin bloquearon la carretera Chilpancingo-Chilapa para exigir a las autoridades que agilizaran la búsqueda.
La mañana del lunes, a un lado de un arroyo en la barranca de Chichipilco, en la colona Candelaria, a solo 200 metros de su casa, fue encontrado el cuerpo desmembrado de Ayelin.
La Fiscalía de Guerrero informó que, de acuerdo a la necropsia de ley, la causa de la muerte fue por traumatismo cráneo encefálico severo.
En un comunicado, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, reprobó y condenó el crimen. Demandó reforzar las acciones de seguridad y señaló que dará seguimiento personal en ese lamentable caso.
La presidenta municipal de Tixtla, Erika Alcaraz Sosa, informó que se investiga a dos personas por la desaparición y asesinato de la niña, un hombre ya detenido y una mujer que será requerida.
“Pues no quiero dar información adelantada de los hechos. Esos en su momento los habremos de dar a conocer. Es indignante que cuestiones personales detonen el odio y sobretodo en un ser humano que no tenía la culpa de nada”, declaró Erika Alcaraz Sosa, presidenta municipal de Tixtla.
La madre de la menor denunció públicamente que un vecino de su colonia la había amenazado y exigió que se siga esa línea de investigación.
Con información de Janosik García
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