En el día de San Valentín, el amor y la amistad se festejó de muy distintas maneras.
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Para los casados es la oportunidad de derramar miel.
“Pues con una cena romántica con las respectivas velitas, una buena melodía y unas buenas poesías también”, dijo Sergio Catalán
Para los solteros no hay límites para expresar su amor.
Para los divorciados puede ser un día de celebración o de olvido.
Otros se casaron.
“Hoy decidí unir mi vida con María, por el motivo que nos conocimos en 1970, y fue una amistad muy bonita, nos enamoramos y hoy decididos unir nuestras vidas”, dijo Sergio Hernández Gil, recién casado.
Cuando se conocieron, Sergio tenía 11 años y María 14. Aunque la vida los llevó por diferentes caminos nunca dejaron de amarse.
Este día se casaron junto con otras 30 parejas en la plaza de toros desmontable “La Petatera” en Villa de Álvarez, Colima.
“Dice que soy el amor de su vida, déjame preguntarle”, señaló María Hernández.
“Claro que sí, eres el amor de mi vida y te quiero como mujer dentro de marco legal”, respondió Sergio Hernández Gil, recién casado.
Otras bodas colectivas se llevaron a cabo en Puebla e Hidalgo. Pero hay quienes ya no creen en esta manera de amar.
“No necesitamos pareja muchas de las personas para ser felices”, indicó Gustavo Espinosa.
-¿Pero si no tiene amor?
“Ah no bueno se podría conseguir. Amor a uno mismo, a la mascota tal vez no sé”, agregó.
“Para mí como es irrelevante el 14 de febrero más bien es difícil cuando no está tu pareja constantemente”, comentó Emilia Vidal, divorciada.
En la Ciudad de México la fecha, en medio de jornada laboral, no pasó inadvertida.
“Es día hábil para el tribunal”, comentó Juan Estrada Negrete, juez 26 de lo Familiar del Tribunal Supremo de Justicia de la CDMX.
-¿Es usted romántico?
“Pienso que sí, por lo menos un detalle sí, ya lo tengo en mente”, señaló.
-¿Qué es?
“Pues algo que le gusta. Ella adora los perfumes”, agregó.
Porque el detalle cuenta y mucho.
“Como mexicanos, identificamos a la comida como parte de una expresión de amor”, dijo Dalia Soto, codueña de El Retorno del Godín, en la colonia Roma.
La hora de la comida fue el momento ideal para expresar el amor y la amistad en zonas de oficinas. Eso sí, con el tiempo justo.
“Hoy sí amerita dejar fuera los tuppers y venir a comer, para celebrar”, dijo Fernanda, oficinista.
Y a pesar de la prisa o las obligaciones, hay quienes mantuvieron vivo el romanticismo.
-¿Qué viene en la carta?
“Unas palabras de amor que regalaron, pues una foto de cuando fuimos a Cancún y un llavero de aguacate”.
-¿Por qué un llavero de aguacate?
“Porque nos gustan los aguacates y queremos tatuarnos un aguacate. ¡No lo puedo creer! Somos cursis, pero medio extraños”, agregó Fernanda, oficinista.
Con información de En Punto.
LLH
