Rosario Robles se presentó ante un juez en el Reclusorio Sur. Fue la audiencia inicial en la que la exsecretaria de Desarrollo Social y de Desarrollo Territorial Y Urbano del gobierno de Enrique Peña Nieto compareció por presunto Ejercicio indebido del servicio público en el caso conocido como “La Estafa Maestra“.
“Aquí estoy como lo prometí, dando la cara como lo he dado siempre y muy tranquila”, dijo Rosario Robles.
Vestida de blanco, Rosario Robles llegó a las diez de la mañana a los juzgados penales federales, en el Reclusorio Sur. Iba acompañada de su hija, de amigos y colaboradores, y de seis abogados de los dos despachos que la representan.
La audiencia empezó con una hora de retraso. Decenas de personas querían ingresar a la sala del juez de Control, Felipe de Jesús Delgadillo Padierna.
El equipo de defensa de la exsecretaria de Sedatu y Sedesol solicitó al juez no incluir en el proceso a la Auditoria Superior de la Federación, por considerar que solo es un órgano técnico de supervisión, y no es titular de bienes públicos.
El juez determinó que la auditoria sí es parte ofendida en el proceso, porque, es la única autoridad facultada para investigar los daños a la hacienda pública.
La Fiscalía general denunció que robles incurrió en el delito de ejercicio indebido del servicio público, al haber omitido informar a su superior, en este caso, el presidente de la República, de conductas irregulares que realizaron sus excolaboradores en Sedesol y Sedatu, y que fueron reportadas por la auditoría. Por estas omisiones, Robles habría causado un daño patrimonial al erario por 5 mil 73 millones 346 mil pesos.
Como prueba, la Fiscalía expuso que dos ex colaboradores de Robles le informaron de manera verbal y por escrito, a través de oficios, de presuntos convenios fraudulentos.
También relató que, en junio de 2014, Robles se reunió con el entonces auditor Juan Manuel Portal, quien le presentó las irregularidades halladas en los convenios que firmó la Sedesol con diversas universidades públicas y que, al escuchar dichas denuncias, Robles abandono la reunión.
El único convenio firmado por Robles fue en julio del 2015, cuando era secretaria de Desarrollo Social, con la Universidad Autónoma de Chiapas, por 60 millones de pesos. El resto de los 26 convenios involucrados, fueron firmados por el entonces oficial mayor de la Sedesol y Sedatu, Emilio Zebadúa y Ramón Sosamontes, quien ocupó el cargo de director de Comunicación Social de la Sedesol.
Los abogados de Robles intentaron diferir la audiencia, con el argumento de que uno de los coacusados, del cual se reservaron el nombre, tenía un amparo. En respuesta, el juez les llamó la atención diciendo que pretendían actuar de manera tramposa.
Sobre las imputaciones en su contra, Robles le dijo al juez que prefería guardar silencio.
La audiencia concluyo a las 9 de la noche con 40 minutos.
Robles no dio declaraciones a la prensa y será hasta el próximo lunes cuando el juez Felipe de Jesús Delgadillo, determine si existen elementos suficientes para vincularla a proceso.
En las próximas 144 horas los abogados de Rosario Robles podrán presentar las pruebas y argumentos a su favor.
Por lo pronto, el juez no impuso ninguna medida cautelar.
Con información de En Punto.
LLH
