En Reynosa, Tamaulipas, familiares de personas desaparecidas y víctimas de la violencia marcharon el sábado para exigir a las autoridades seguridad, paz y justicia. La marcha fue poco concurrida, en la ciudad priva el miedo.
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Luego que un grupo de hombres armados asesinara a 15 personas, al azar, en diversas colonias populares de Reynosa el pasado 19 de junio, el colectivo “Amor por los desaparecidos en Tamaulipas” y organizaciones civiles convocaron a una marcha por la paz en esa ciudad, tuvo poca respuesta, apenas asistieron alrededor de 60 personas.
“Marcho por mi tía. Fue a vender un vehículo, ya no regresó, se llama Laura Priscila Bello Castañeda, desapareció el 27 de abril del 2021. No hemos tenido respuesta. No hay nada, no hay apoyo, no hay nada”, reiteró Alondra Rodríguez.
“César Odilón Arteaga está desaparecido desde hace 4 años. La autoridad no dice nada, no tenemos autoridades aquí, queremos autoridades. Desapareció en Reynosa. Aquí no tenemos ley de ninguna clase”, insistió el señor Odilón Arteaga.
La marcha recorrió el Bulevar Morelos hacia la zona centro de Reynosa y culminó en la plaza principal. Se oró y se guardó un minuto de silencio por las víctimas de la delincuencia. La manifestación fue organizada por Gustavo Azuara.
“Las personas que están aquí son las que ya están cansadas de tanta muerte, de tantas personas desaparecidas, son las personas que se están manifestando también, que nos están reflejando su apoyo”, reiteró.
De las 15 víctimas del fin de semana pasado únicamente acudieron familiares del taxista Alfredo Recio Rosas.
“Todavía hay balaceras para el lado de la Almaguer, todo eso reportan en los grupos que tiene la gente, camionetas con hombres armados, no sé dónde este la seguridad en Reynosa”, agregó la señora Juana Recio, familiar de taxista asesinado Reynosa, Tamaulipas.
“Ya nos han amenazado. Yo no tengo miedo, por qué, porque se murió mi hermano, no peleando nada y no debiendo nada, yo prefiero morir peleando algo, pero algo justo, no algo injusto”, enfatizó Joel Recio.
Un par de horas después de haber concluido la marcha se difundió por redes sociales que Gustavo Azuara había sido “secuestrado por hombres armados”. En su cuenta de Facebook apareció un mensaje que indicaba que se le había advertido que no hiciera la marcha. Azuara apareció la medianoche del sábado.
“Me levantaron, me quitaron, desconozco, vi que era monte, agarre lo que, en una casa, le grite a una persona que se acercó, me prestó estos pantalones, esta camisa y estos tenis para vestirme porque estaba plenamente, literalmente, encuerado. Gracias a Dios, estoy bien, estas personas me dijeron varias cosas. No puedo decir que es gente del crimen organizado, lo voy a tomar como un asalto, nada más porque que les puedo decir, estoy nervioso”, detalló Azuara.
En el centro de la ciudad, cientos de negocios han sido cerrados y decenas de casas e inmuebles se encuentran vacías, abandonadas o en renta. La inseguridad no cesa desde hace diez años en esta ciudad fronteriza.
“Estamos solicitando a las autoridades que se intervenga con una estrategia que permita disminuir los delitos patrimoniales que sufren los negocios de nuestra ciudad. Nos hemos adaptado a vivir con estas circunstancias tan difíciles”, afirmó Roberto Cruz, CANACO, Reynosa, Tamaulipas
“Siempre hemos tenido ese problema de tener las balaceras a la orden del día, realmente uno, ya tenemos el oído un poquito más fino, que sabemos y escuchamos un balazo tenemos que resguardarnos dónde sea”, concluyó un habitante de Reynosa, Tamaulipas.
Con información de Fátima Monterrosa y Jorge Ulloa
KAH
