La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza comenzó en el sureste del estado de Texas con los preparativos para construir el primer tramo del muro fronterizo propuesto por el presidente Donald Trump, que podría comenzar en enero de 2018, reveló el diario Texas Observer.
Funcionarios federales de Estados Unidos informaron al semanario que la pared será de 5.4 metros de altura y se extendería casi 5 kilómetros a lo largo del refugio de vida silvestre en McAllen.
Esas mismas versiones señalaron que los fondos para pagar la obra podrían ser transferidos desde el Departamento de Seguridad Interior.
La administración Trump habría decidido comenzar a construir el muro a través del refugio porque la propiedad es del gobierno federal, lo que significa que no tendrá que negociar con los terratenientes privados. Al menos 95% de la frontera de 1,241 millas de Texas es de propiedad privada.
El refugio está ubicado en la frontera entre Texas y México, a unos 10 kilómetros al sureste de McAllen, en el Valle del Río Grande (Foto: wfaa.com)
CONSTRUCCIÓN DEL MURO PONDRÍA EN PELIGRO REFUGIO ANIMAL
De acuerdo al diario, trabajadores perforaron el actual dique de tierra en el refugio de vida silvestre y extrajeron muestras de suelo para prepararse para la construcción del muro, si el gobierno de Trump construye el muro en esa zona pondría en peligro el refugio animal.
El refugio, ubicado en la frontera entre Texas y México, a unos 10 kilómetros al sureste de McAllen, en el Valle del Río Grande, es conocido como uno de los principales destinos de observación de aves en el país.
Los legisladores de ambos partidos, especialmente los que representan a los estados y distritos fronterizos, han cuestionado si un muro es el mejor enfoque para asegurar la frontera, señalando el costo y las complicaciones en la obtención de derechos sobre la tierra para construir.
Con información de Texas Observer
HVI
