El Gobierno de República Checa anunció que a lo largo del mes de febrero se irán levantando la mayoría de las medidas restrictivas para frenar el avance del covid, de tal modo que es probable que de cara al mes que viene tan sólo quedaría vigente el uso obligatorio de cubrebocas en espacios interiores.
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Bien es cierto que las autoridades checas han hecho especial énfasis en que la evolución y eliminación de las restricciones dependerá en todo momento del desarrollo de la pandemia, aunque se estima que para finales de este mes se haya superado esta última ola, alimentada por la variante ómicron.
Así, a partir de este jueves, los clientes de restaurantes y peluquerías, o quienes acudan a cines, teatros o eventos deportivos ya no tendrán que presentar el certificado de vacunación. Además, el primer ministro, Petr Fiala, ha anunciado que el número de participantes en espectáculos culturales y deportivos aumentará de forma gradual, recoge ‘Ceske Noviny’.
“Iremos aumentando paulatinamente el número de visitantes a eventos culturales y deportivos, con miras a que muy pocas de las medidas restrictivas estén vigentes a partir del 1 de marzo. Prácticamente solo con mascarillas”, ha señalado Fiala.
Sin embargo, algunos expertos sanitarios y epidemiológicos han criticado este anuncio del Gobierno de República Checa al considerar que la eliminación de algunas restricciones es demasiado prematura, según recoge la agencia alemana DPA.
El último balance de la situación sanitaria en el país refleja más de 37 mil contagios y 21 fallecidos. Con esto, el Ministerio de Salud ha registrado ya más de 3.3 millones de infecciones y 37 mil 612 decesos desde el inicio de la pandemia.
Con información de Europa Press
HVI
