El funeral de Valeria ‘N’, presunta integrante de ‘La Unión Tepito‘ asesinada a balazos la noche de este sábado en la colonia Morelos de la Ciudad de México, se convirtió en una fiesta de barrio donde a nadie le importó la sana distancia.
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Entre música, alcohol, armas y baile, decenas de personas se despidieron de la mujer, en un velatorio localizado en el corazón de Tepito.
El viernes, este grupo de policías también realizó una fiesta con bebidas alcohólicas dentro de la estación del Metro San Lázaro Línea B. El Consejo de Honor y Justicia de la Policía capitalina determinará su situación jurídica.
El fin de semana, vecinos de la colonia Nápoles, en la alcaldía Benito Juárez reportaron esta fiesta de varias horas, con sonidero y fogata en la calle Nueva York.
En Naucalpan, Estado de México, fue desmantelada una fiesta clandestina en la colonia Ampliación La Escalera, decenas de jóvenes fueron desalojados.
Mientras que en Ecatepec, autoridades municipales lograron desalojar este domingo una pelea de gallos con más de 200 asistentes, entre ellos varios niños, que se realizaba en colonia Luis Donaldo Colosio.
También los habitantes de Santa Ana Tlalpatitlán, en Toluca, llevaron a cabo su festejo patronal y recorrieron las calles bailando al ritmo de banda.
Cerca de 200 personas de la colonia Granja de San Isidro, en la ciudad de Puebla, salieron a las calles a celebrar el triunfo de su equipo en un torneo de futbol donde participaban colonias aledañas y en la ciudad de San Martín Texmelucan, un billar que operaba clandestinamente fue clausurado.
Mientras que en Chiapas, decenas de personas, en su mayoría jóvenes indígenas de la etnia Tzotzil, asistieron a una fiesta clandestina en las bodegas del mercado del norte de San Cristóbal de las Casas. Durante la congregación, un joven indígena disparó un arma de fuego de uso exclusivo del Ejército.
Con información de En Punto
KAH
