La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos inició la construcción de un muro metálico de seis metros de altura en el desierto de Santa Teresa, en Nuevo México, para reemplazar las barreras de metal que existían, a fin de impedir el cruce de migrantes indocumentados.
Ramiro Cordero, supervisor de la Patrulla Fronteriza Sector El Paso, en Texas, indicó que el muro que se va a reemplazar medirá aproximadamente 20 millas.
Señaló que el muro ha dado frutos por varios años y “ha podido prevenir el cruce de personas a pie, incluso de vehículos, pero, sin embargo, sabemos que de todas maneras las personas pueden pasar”.
La construcción de este muro tendrá un costo de 73.8 millones de dólares y se extenderá a lo largo de 32 kilómetros, desde Santa Teresa hacia Columbus, en Nuevo México.
Se ha diseñado con una altura de seis metros y construido a base de tubos de metal rellenos con concreto.
La frontera de México con Estados Unidos tiene una extensión de tres mil 169 kilómetros, en mil 50 ya existe un muro construido, sin embargo, en algunas contra partes del desierto, solamente hay una valla construida a base de metal.
La Patrulla Fronteriza sector El Paso confirmó también la presencia de la Guardia Nacional, en la región.
Durante el fin de semana, sostuvieron reuniones con mandos de la Guardia Nacional de Nuevo México, para diseñar estrategias de vigilancia en la frontera.
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Con información de Francisco Javier Carmona.
RMT
