Gabriel y Ana son comerciantes en Puerto Progreso, Yucatán, y todos los días retiran de la playa el sargazo que recala del mar.
Ambos se unieron a las brigadas de limpieza que extraen alrededor de 2 toneladas al día de esta alga, que afecta los 330 kilómetros de las costas de Yucatán.
Se escarba y se mete en el hueco, el sargazo se entierra, es la forma que tenemos de limpiar la playa”, indicó Gabriel Medina, comerciante.
“A veces la clientela dice no me puedo bañar porque está sucio y todos nosotros diario empezamos a limpiar, a limpiar y queda limpio”, señaló Ana Estrada, comerciante.
“Los mismos trabajadores se ayuden, ambos, para mantener el lugar limpio, no esperar a que otra gente lo venga a hacer”, dijo Leny Gijón, líder de trabajadores de pequeños restaurantes de Progreso.
Desde 2015, esta alga ha llegado con mayor intensidad a las costas de Yucatán, la mayoría se concentra en los 5 puertos de abrigo, que son donde se refugian las más de 15 mil lanchas de ribera y 4 mil barcos de altura.
Al haber tanta demanda de sargazo impide la labor, es una situación que complica la labor del pescador. Nos afecta en todo, en la parte de las artes de pesca como el motor fuera de borda”, externó Miguel Ek, comisario municipal de Puerto Sisal.
“Cuando pegan los frentes fríos es cuando recala lo que es sargazo, aquí no se ve mucho, la vez pasada si hubo bastante, ahorita está bajo, ya limpiaron”, aseguró Cristóbal Martín, pescador.
El alga que se recolecta es enterrada o se deposita en sitios especiales en los puertos para evitar el mal olor cuando se descompone.
En julio de 2018 fue el mayor recale de algas en Yucatán.
En 2019, hay una menor concentración debido a que se han registrado pocos frentes fríos.
Este sargazo no es el que llega a Quintana Roo, es de otro tipo y se trata de 3 especies de alga y dos de pasto marino, que fueron arrancados por la corriente del subsuelo y que no se quedaron en el agua, fueron expulsados a la playa, por eso se mantienen las aguas limpias.
Con información de Alejandro Sánchez.
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