El aeropuerto de Saná reabrió este lunes para vuelos comerciales con su primera conexión aérea desde 2016 con rumbo a Amán, una de las condiciones de los rebeldes chiíes hutíes para participar en conversaciones de paz con el fin de acabar con la guerra que ha provocado la peor catástrofe humanitaria del planeta.
Un avión de la compañía aérea Yemen Airways despegó esta mañana desde la capital yemení, controlada por los rebeldes, con cientos de pasajeros yemeníes, una operación que estaba prevista realizarse el pasado 24 de abril pero que se retrasó por una disputa por los pasaportes emitidos por los hutíes.
Desde agosto de 2016, de ese aeropuerto solo han salido o entrado vuelos de Naciones Unidas o de organismos de ayuda internacional después de que la coalición militar liderada por Arabia Saudí, que controla el espacio aéreo en el Yemen, cerrara el aeropuerto para vuelos comerciales.
Cin información de EFE
KAH