Los tres principales centros mineros más antiguos de Álamos, Sonora, ahora son pueblos fantasmas.
La Aduana, Promontorios y Minas Nuevas fueron centros mineros descubiertos por los españoles a finales del siglo XVl. Tras el hallazgo de numerosos yacimientos de oro y plata. Durante 300 años vivieron su esplendor económico.
“Hay tres pueblos que viene siendo prácticamente la punta de lanza, en cuanto a los asentamientos, en cuanto a la fundación y en cuanto al auge minero. Los tres formaban un conjunto minero que le dio a los residentes una riqueza incalculable”, señaló Juan Vidal, historiador de Álamos.
Ahora sus ruinas son un gran atractivo turístico.
“Parte de las ruinas y de los lugares de las minas son los que nosotros utilizamos para hacer ecoturismo, nosotros ahora lo utilizamos para hacer rappel, tenemos áreas de acampar, hacemos recorridos guiados al lugar, hay ciclismo de montaña”, detalló Valentina López, guía turística Álamos.
También, poseen un gran atractivo de vegetación y fauna.
“La Aduana es un relicario, muchas personas vienen a rejuntarse con su pasado. Donde se encuentra una reserva ecológica que desde el año 2000 está considerada como parte de la reserva de la biosfera, es un área protegida”, aseguró Juan Vidal, historiador Álamos.
Se cuenta que, en Promontorios, la mayor parte de sus habitantes murió de cólera en 1900.
“Es uno de los pueblos más antiguos y que todavía existe porque Promontorios es ruina, es pueblo fantasma”, comentó Juan Vidal, historiador Álamos.
Decenas de turistas nacionales y extranjeros, disfrutan de los paisajes y las ruinas de los pueblos mineros de Álamos diariamente.
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Con información de Erika Palma
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