Ciudadanos y organizaciones de defensa de derechos civiles, incluidas las integrantes de la Alianza Nacional de Trabajadoras del Hogar, protestaron en el Congreso de Miami Dade en contra de la decisión del alcalde, Carlos Giménez, quien el pasado 26 de enero ordenó a las cárceles de esa comunidad a cumplir con las solicitudes de detención de inmigrantes emitidas por el Gobierno federal, para no incurrir en recortes de fondos, tal como advirtió el presidente, Donald Trump, contra las ciudades santuario.
La protesta se realizó el martes, durante la primera audiencia pública en la comisión del condado de Miami Dade, donde se encuentra el segundo mayor porcentaje de inmigrantes en Estados Unidos, con más de un millón 200 mil, sólo después de Los Angeles.
Serena Pérez, integrante de la Alianza Nacional de las Trabajadoras del Hogar, dijo: “Fue una cosa tan indignante, una violación a nuestro derecho a tener nuestra voz y expresarnos públicamente, porque apenas mencionábamos la palabra inmigrante o inmigrante o indocumentado, nos cortaban el micrófono y nos sacaban del podio”
El departamento de correcciones de Miami Dade informó a la población sobre diversas detenciones a indocumentados, a raíz de esta decisión.
Van casi “11 casos, desde la semana pasada, de personas que han sido entregadas a inmigración por las autoridades policiales”, señaló Serena.
La próxima audiencia pública será el 17 de febrero.
El alcalde, Carlos Giménez, reiteró que el condado se unirá a las políticas migratorias del Gobierno federal.
“Están solicitando una petición de retención por 48 horas y eso es lo que cumplimos, de 2008 a 2014, y eso es lo que vamos a cumplir ahora”, afirmó.
Con información de Alan Pérez.
RMT
