El petróleo perfilaba una caída semanal, a pesar de que subía de precio durante el viernes, a causa de la creciente preocupación por disputas comerciales y la desaceleración del crecimiento económico global que podría afectar la demanda de productos petroleros.
También preocupan al mercado las recientes crisis monetarias en economías emergentes como Turquía, cuya divisa recientemente perdió más del 40 por ciento de su valor ante el dólar estadounidense.
Los futuros del crudo Brent subían 31 centavos, a 71.74 dólares por barril. En tanto, el petróleo West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos ganaba 15 centavos a 65.61 dólares por barril.
El barril Brent se encamina a anotar un declive de 1.5 por ciento esta semana, en una tercera caída semanal consecutiva. El WTI, en tanto, se dirige a una séptima semana de pérdidas con una baja de 3 por ciento.
Operadores dijeron que la principal presión sobre los precios es el oscurecimiento del panorama económico debido a tensiones comerciales entre China y Estados Unidos. También forma parte de la agenda la depreciación de las monedas en economías emergentes, las cuales están pesando en el crecimiento y en el consumo de combustibles.
Un banco de inversión estadounidense afirmó el viernes que existe una “escasez de demanda” emergente por crudo y productos refinados, mientras que otra institución financiera de Singapur afirmó que datos chinos muestran un declive sostenido en la actividad.
La economía china enfrenta vientos en contra adicionales, debido al aumento de las tensiones comerciales”, afirmó un informe del banco DBS de Singapur.
Datos del Gobierno de Estados Unidos divulgados esta semana mostraron una gran acumulación de inventarios de crudo y también un incremento sustancial en la producción.
Pese a factores negativos, analistas dijeron que los precios no han caído más debido a sanciones estadounidenses contra Irán, que afectarán al sector financiero a partir de agosto e incluirán importaciones de petróleo a partir de noviembre.
Con información de Reuters
asa.
