El asesor económico de la Casa Blanca, Peter Navarro, se disculpó este martes por haber dicho que al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, le espera “un lugar reservado en el infierno”.
Déjenme corregir un error que cometí”, dijo Navarro en un evento organizado por un diario estadounidense. “Utilicé un lenguaje que fue inapropiado”, añadió.
Durante el pasado fin de semana, Navarro se sumó a los funcionarios que censuraron a Trudeau tras el cierre de la cumbre del Grupo de Siete (G7), durante la cual las grandes economías mundiales se enfrentaron en discusiones por los aranceles al comercio.
Mi misión era enviar una dura señal de fortaleza”, afirmó Navarro en el acto, “El problema es que al verbalizar ese mensaje utilicé un lenguaje inapropiado”
En una entrevista con medios estadounidenses el domingo, Navarro criticó a Trudeau tras la conferencia de prensa que ofreció después de la cumbre con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y otros líderes mundiales del G7.
Hay un lugar especial en el infierno para cualquier líder que se involucra en la diplomacia de mala fe con el presidente Donald J. Trump y luego intenta apuñalarlo por la espalda (…) y eso fue lo que hizo Justin Trudeau con ese ardid de conferencia de prensa, eso es lo que el débil y deshonesto Justin Trudeau hizo”, afirmó Navarro el domingo.
En la cumbre del G7, los líderes de Europa y Canadá intentaron prevenir el conflicto comercial por medio de argumentos y estadísticas acerca de cuántos trabajos estadounidenses dependían de los intercambios comerciales y la invasión extranjera.
Hacia el final, los países miembros firmaron un acuerdo en el que se prometía reducir los aranceles y fomentar de formas distintas el comercio internacional como la reducción de los subsidios y eliminación de barreras tanto arancelarias como no-arancelarias.
Con información de Reuters
ASA
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