ECOLOGíA

Cacerola de mar desaparecería de humedales en Yucatán tras sobrevivir a cinco extinciones

La depredación de esta especie y la contaminación y reducción de su hábitat, ha propiciado a un más la reducción de la biomasa

La cacerola de mar, una especie de cangrejo que habita en los humedales de Yucatán podría extinguirse.

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Llega a alcanzar 60 cm de largo y 30 cm de ancho. Habita la tierra desde hace más de 450 millones de años y logró sobrevivir a las 5 extinciones masivas de la historia del planeta.

Actualmente está en peligro de extinción y su importancia en el ecosistema estriba en su labor de limpieza de las ciénagas, se alimenta de peces muertos, son fuente de alimento de tortugas marinas y sus larvas son consumidas por especies de aves.

“Sería muy trágico que, si cinco eventos de extinción masiva no lograron acabar con el linaje, los seres humanos fuéramos los que lográramos realmente extinguir unl linaje de especies”, dijo Jaime Saldívar, director de Investigación de la Universidad Anáhuac Maya.

“Son como biomonitores, o sea, tienen una respuesta inmediata ante un estresor, ante un contaminante”, precisó Mónica Amendala, investigadora del CINVESTAV.

“Voy a tomar el ancho del cromosoma, que es como le dije, la medida más importante”, mencionó Miguel Villegas, investigador Cinvestav.

Científicos de centros de investigación, universidades y autoridades ambientales del país, iniciaron el marcaje de cacerolas de mar para conocer la biomasa que hay en la Ciénegas, humedales y litoral de Yucatán.

Estudian la sangre azul de las cacerolas del mar

Este marcaje, medición, estudio de su sangre azul en laboratorio y posterior liberación, determinará la concentración de su población que se encuentra en los niveles más bajos en la historia de esta especie.

“Tenemos los primeros animales marcados y todavía no empezamos a recuperar animales marcados, entonces estamos muy lejos de decir cuántos hay”, explicó Jaime Saldívar, director de Investigación de la Universidad Anáhuac Maya.

La depredación de esta especie y la contaminación y reducción de su hábitat, ha propiciado a un más la reducción de la biomasa

“Los metales pesados al estar presentes en el ambiente, lo que tienen estas sustancias es que no se degradan, se bio acumulan por ejemplo el mercurio, el plomo, esos si son absorbidas por las plantas o consumidos por algún animalito”, dijo Sayda Rodríguez, secretaria de Desarrollo Sustentable de Yucatán.

Los estudios que se realizan son para conocer cómo su ADN resiste la ingesta de contaminantes, incluyendo residuos de hidrocarburos y lograr que la biomasa aumente.

En 2020 se logró recuperar 10 cargamentos ilegales de este animal que estaba a punto de ser utilizado como carnada.

Con información de Alejandro Sánchez

HVI