ECONOMíA

Paraísos fiscales tienen impacto en degradación ambiental

Paraísos fiscales tienen un impacto en degradación ambiental, desde el momento en que son usados en actividades como la pesca ilegal o la de sectores económicos asociados con la deforestación de la Amazonia, de acuerdo con un estudio publicado hoy por la revista Nature.

La investigación revela que el 70 por ciento de los barcos conocidos involucrados en la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, están o han sido puestos bajo la jurisdicción de un paraíso fiscal, particularmente Belice y Panamá. El reporte también considera que la pérdida de ingresos fiscales causada por esos paraísos debe verse como un subsidio indirecto a las actividades económicas que socavan los esfuerzos de conservación globales.

La combinación de paraísos fiscales y uso de banderas de conveniencia permite a las compañías tener embarcaciones pesqueras con identidad dual, una de las cuales se usa para actividades legales y otra para la pesca ilegal.

Nuestro análisis muestra que el uso de paraísos fiscales no es solo un desafío económico y sociopolítico, sino también ambiental”, subraya Victor Galaz, de la Universidad de Estocolmo y autor principal del estudio.

Decomiso del navío pesquero ilegal ‘Viking’, uno de los buques más buscados por las autoridades en aguas de Indonesia. La Marina de Indonesia y el ejército de Corea del Sur luchan sostenidamente contra las prácticas de pesca ilegal.o (AP Images/Archivo)

De acuerdo con los autores, del Centro de Resiliencia de la Universidad de Estocolmo y al programa Global Economic Dynamics and the Biosphere (GEDB) de la Academia de Ciencias sueca, se trata del primer estudio que muestra los vínculos de los paraísos fiscales con sectores económicos que causan graves impactos ambientales globales.

La naturaleza global de las cadenas de valor pesqueras, las estructuras complejas de propiedad y las capacidades de gobierno limitadas de muchas naciones costeras hacen que el sector sea susceptible al uso de paraísos fiscales”, explica Henrik Osterblom, subdirector científico del Centro de Resiliencia y uno de los autores del estudio.

Otro dato importante incluido en la investigación tiene que ver con el capital extranjero que reciben las empresas de carne de res y soja que se han vinculado con la deforestación de la Amazonia brasileña.

Entre octubre de 2000 y agosto de 2011, esas empresas recibieron un total de 26 mil 900 millones de dólares en capital extranjero. El 68 por ciento de ese capital, o 18 400 millones de dólares, se transfirió a través de paraísos fiscales, sobre todo desde las Islas Caimán.

Los investigadores sugieren que es probable que se estén usando paraísos fiscales para apoyar otras actividades perjudiciales para el medioambiente como la tala ilegal o el tráfico ilícito de flora y fauna.

Con información de EFE

asa.