Como Pachita, en México viven casi cuatro millones de adultos mayores de 60 años de edad, pero de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo), para el 2030, el número de personas de la tercera edad crecerá a 20 millones.
“Me siento bien porque todavía puedo hacer mis cosas, voy a la plaza, lavo, guiso y todo, porque como soy sola. Tengo familia, pero ellos viven su vida y yo vivo la mía solita”, comentó Francisca Domínguez, “Pachita”, de 84 años.
Pachita, como le dicen desde pequeña, tiene 84 años de edad y es una mujer independiente… Goza de buena salud y acude 2 veces por semana al Hospital General de México.
“Yo vengo aquí a distraerme y a la vez a estar aprendiendo cositas. Me gusta mucho bordar, tejer, eso es lo que hago. Me cuido mucho, siento esto y luego, luego vengo con la doctora, ya me mandan a donde me toque ir y ya, me atiendo, me curo, me procuro”, indicó Francisca Domínguez.
Mantenerse activa, le ha permitido prolongar el proceso degenerativo y el deterioro funcional.
“Es una forma también de nosotros de dar seguimiento de una forma más amigable, que no solamente sienta que viene a su consulta, ellos vienen a pintar y hacer actividades, pero nosotros estamos checando cómo va, cómo está caminando, si ya está más contento, si el familiar que lo cuida ya lo está haciendo mejor, qué dudas tiene”, comentó Leonor Zapata Altamirano, geriatra del Hospital General de México.
“Envejecimos de una manera muy rápida, ganamos 40 años de esperanza de vida. En 1930 vivías en promedio 33 años y ahora estamos viviendo, como te decía, más de 75 años, fue a gran velocidad y es maravilloso, le tenemos temor a envejecer y más bien tenemos que considerarlo como una maravilla, vivir muchos años, asumir todo lo que sucede con esos años que estamos viviendo más que se respete nuestra autonomía, que podamos llevar una vida con bienestar ese es el gran reto”, apuntó Ana Gamble Sánchez Gavito, asesora del INAPAM.
La clave para que la población pueda envejecer adecuadamente es la prevención, y ésta depende de muchos factores, entre ellos está tener una alimentación balanceada, actividad física constante y evitar el tabaco, el consumo nocivo de alcohol y las sustancias tóxicas.
Esto evitará, en gran medida, que las enfermedades crónico degenerativas como la hipertensión, diabetes y padecimientos cardiovasculares se presenten de manera temprana y causen mayores complicaciones.
“Empezamos a envejecer desde que nacemos. Entre más procuremos nosotros tener una expectativa de vida más allá de 75, 80, 85 años que -para el 2050 se pretende que sea de 85 años- lógicamente nuestro crónico degenerativas van a ser más evidentes, y si son más evidentes, vamos a requerir hasta cuatro o más veces acudir al médico que cuando teníamos 45, 50, 60 años”, destacó Lorenzo García, jefe de Geriatría del Hospital General de México.
Pachita recuerda su infancia feliz, no tuvo hijos, pero recuerda con cariño a su esposo quien falleció hace siete años.
“Para mi yo si he sido muy feliz en mi vida, pobrezas y lo que usted guste, pero con cariño que es lo principal. Yo nada más pienso y le pido a Dios que cuando ya no pueda valerme por mi misma, que entonces sí me recoja”, dijo Pachita.
Con información de Farah Reachi.
LLH
