Al llegar a Dublín para participar en el encuentro mundial de las familias el papa Francisco volvió a denunciar el grave escándalo causado en Irlanda por los abusos sexuales a menores por parte de hombres de la Iglesia.
El fracaso de las autoridades eclesiásticas, obispos, superiores, religiosos, sacerdotes y otros, al afrontar adecuadamente estos crímenes repugnantes ha suscitado justamente indignación y permanece como causa de sufrimiento y vergüenza para la comunidad católica. Yo mismo comparto estos sentimientos”, dijo el papa Francisco.
El Papa respondió con estas palabras al primer ministro irlandés Leo Varadkar, quien tras reconocer el rol de la Iglesia católica en la vida del país se refirió a las dramáticas situaciones vividas por mujeres, niños, huérfanos, personas discapacitadas, víctimas de abusos.
Personas tenidas en lugares oscuros, detrás de puertas cerradas, gritos pidiendo ayuda que no fueron escuchados y estas heridas están todavía abiertas y hay mucho que hacer aún para que haya justicia, verdad y curación para las víctimas y los sobrevivientes”, indicó Leo Varadkar, primer ministro irlandés.
En el castillo de Dublín, el Papa recordó su reciente carta escrita a todo el pueblo de Dios sobre este tema.
He reafirmado mi compromiso, es más un compromiso más fuerte para eliminar este flagelo en la Iglesia, a cualquier precio. Deseo que la gravedad de los escándalos de los abusos, que han hecho emerger las faltas de muchos, sirva para recalcar la importancia de la protección de los menores y de los adultos vulnerables por parte de toda la sociedad”, dijo el papa Francisco.
En la catedral, el Papa rezó durante unos minutos frente a una vela colocada ahí para recordar a las víctimas de abusos. Tal y como se esperaba, al volver a la Nunciatura, el Papa mantuvo un encuentro con víctimas irlandeses de abusos.
El santo padre tuvo un encuentro de una hora y media con las víctimas entre ellos había ocho personas, entre ellas, tres mujeres y también dos sacerdotes”, dijo Greg Burke, portavoz del Vaticano.
La primera jornada del Papa en Irlanda finalizó en el Estadio Croke Park con la fiesta de las familias llegadas de todo el mundo para este encuentro.
El papa Francisco afirmó que en toda sociedad, la familia generan paz porque enseñan amor, cercanía, entendimiento y perdón, y estos son los mejores antídotos al odio, a los prejuicios y a la venganza que envenenan la vida de las personas y de las comunidades.
El Papa, quien escuchó testimonios de familias de diferentes países del mundo, afirmó que el matrimonio no es una fría obligación legal, sino un compromiso de amor y fidelidad para siempre abierto a la vida.
Con información de Valentina Alazraki
RAMG-JLR
