“¡Cuántas veces, mientras se lee la palabra de Dios, se comenta, ‘mira esto, mira aquello’! ¿Se deben hacer comentarios cuando se lee a palabra de Dios? No. Hay que dejar los chismes y escuchar en silencio”, dijo Francisco, de forma espontánea y dejando a un lado la homilía que tenía preparada, durante la audiencia general de este miércoles.
El pontífice afirmó que “para escuchar la palabra de Dios es necesario tener también el corazón abierto” porque esta “entra por las orejas, pasa al corazón y de ahí a las manos”.
Finalmente, rechazó que para las lecturas de misa se utilicen en ocasiones “elecciones subjetivas”, como “la omisión de lecturas o la sustitución con textos no bíblicos”.
“Esto está prohibido. Empobrece y compromete el diálogo entre Dios y su pueblo en la oración”, concluyó.
Con información de EFE.
RAMG