La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) mejoró las expectativas de crecimiento para México a 2.5 por ciento este año y a 2.8 por ciento en el 2019. Esta modificación prevé un aumento de 0.3 y 0.5 por ciento ante el diagnóstico previo, realizado en noviembre del 2017.
Según el reporte, presentado por el secretario general Ángel Gurria, la mejora del consumo privado y las exportaciones respaldarán un crecimiento estable en México, parte del argumento por el cual se proyectan los números superiores a los de noviembre del año anterior.
Sin embargo, el organismo reiteró la necesidad de una segunda ola de reformas para fortalecer el Estado de derecho en el país y no perder la fuerza de las reformas ya implementadas.
También resaltó que las reformas sólo podrán ser efectivas si se aplican a nivel nacional, de la mano de un reforzamiento en la aplicación de la ley desde las instituciones, según el organismo. En este sentido, propuso como una acción conveniente acelerar una reforma judicial.
Las reformas estructurales ya han dado resultados visibles, pero los retos persisten, incluyendo los altos niveles de violencia y corrupción, pobreza, desigualdad, informalidad y bajo crecimiento de la productividad”, advirtió el organismo en su reporte ‘Perspectivas Económicas’. “Cosechar todos los beneficios de las reformas estructurales requerirá mantener el momentum para su implementación a nivel nacional, complementado con una nueva ola de reformas para fortalecer el Estado de derecho y mejorar la calidad institucional”, añadió.
La OCDE apuesta por la continua reconstitución fiscal del país, aunque sea lenta, como consecuencia de las reformas ejecutadas, lo que podría permitir una mejora de la inversión pública y gasto social dentro de una disciplina para mantener en bajos niveles la deuda pública en relación al Producto Interno Bruto (PIB).
Para respaldar esto, la organización propone aumentar los ingresos fiscales a través de la reducción de exenciones al impuesto al valor agregado (IVA) y el impuesto sobre la renta (ISR). También se puso sobre la mesa la introducción de tasas verdes y un impuesto de sucesión.
Unos mayores impuestos en estas fuentes permitirían recortar las tasas sobre corporaciones, una de las más altas de la OCDE, a favor de una combinación de impuestos favorables al crecimiento”, apunta la institución. “Una coordinación entre la recolecta de tasas y la seguridad social contribuiría a reducir la evasión de impuestos”
Con respecto a las preocupaciones de la inversión privada ante la incertidumbre, la organización comentó que un buen resultado en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLCAN) con Estados Unidos y Canadá podría estimularlas.
El informe resalta que los niveles de desempleo se mantienen en niveles históricamente bajos, con una consolidación de la fuerza de trabajo formal que no se ha traducido en la aparición de presiones salariales.
El organismo planteó que la inversión pública seguirá siendo tenue mientras la inflación pasa de su nivel más alto a los objetivos fijados del Banco de México, con un 4.4% previsto este año y un 3.4% el siguiente.
Con respecto a las amenazas al crecimiento económico de México, el organismo aseguró que las turbulencias de los mercados financieros asociadas a la expectativa de cambios en la política monetaria de Estados Unidos o a una incertidumbre sobre un ambiente de negocios podrían conducir a la volatilidad cambiaria, endurecimiento de las condiciones financieras y una salida de capitales.
Con información de EFE y El Financiero
ASA
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