CRIMEN Y SEGURIDAD

Niños y niñas de Manzanillo, principales víctimas de la violencia en Colima

El caso del joven Germán Mauricio, asesinado a sangre fría el domingo pasado en Manzanillo, Colima, no es un caso aislado.

En los últimos 15 días, otros tres menores de edad han sido asesinados y una más fue herida de bala.

Mientras se realizaban los servicios funerarios de Germán Mauricio, otra familia lloraba la muerte de Yareli Bonilla, una estudiante de preparatoria, de 16 años de edad, asesinada el pasado 20 de mayo a unas cuadras de su domicilio, en la calle Emiliano Zapata, en la delegación de Santiago de la ciudad de Manzanillo.

“Yo estaba en el trabajo, me hablaron y me dijeron que mi hija, que había habido una balacera y que a mi hija le había tocado. Ya vi a mi hija, ahí balaceada, con un balazo en la cabeza”, explicó Dulce Covarrubias Bonilla, madre de Yareli.

A una semana de la muerte de Yareli, su madre acudió al Ayuntamiento de Manzanillo en busca de ayuda porque ninguna autoridad se había puesto en contacto con ella.

“Lo único que sé, es un dolor tan más grande perder un hijo y más de la manera, o sea, tanta delincuencia tanta inseguridad que hay que ahora a la gente inocente le está tocando”, indicó Dulce Covarrubias Bonilla, madre de Yareli.

Días antes del homicidio de Germán, fue localizado el cuerpo sin vida de otra menor de 16 años en una fosa clandestina junto con otros cuatro cadáveres en los límites de los municipios de Manzanillo, en Colima, y de Cihuatlán, Jalisco.

Una semana antes, el 13 de mayo otra niña, de 14 años de edad, fue asesinada a tiros en la entrada de su casa frente a sus familiares, en el ejido de “El Colomo”.

Mientras que el pasado 24 de mayo una niña, de ocho años, resultó herida al recibir un disparo, cuando hombres ingresaron a su domicilio, para matar a su abuelo.

Hasta ahora no hay detenidos por ninguno de los cuatro homicidios.

“Lo único que tenemos que tener claro todos, es que tenemos un grave problema de inseguridad y que hay gente afuera que no tiene un solo escrúpulo en cometer ningún tipo de estos actos”, apuntó Griselda Martínez, presidenta municipal de Manzanillo.

Con información de Bertha Reynoso.

LLH