La situación al exterior de la estación migratoria Siglo XXI, en Tapachula, Chiapas, es cada vez más extrema. Migrantes africanos que llevan semanas esperando ser atendidos muestran su desesperación.
Este martes volvieron a enfrentarse con agentes del Instituto Migratorio Nacional.
Los niños que llevan días viviendo en la calle comienzan a mostrar estragos en su salud.
Como Jenifer, una niña africana de un año de edad. Lleva varios días enferma y no para de llorar. Tiene fiebre, granos en la cabeza y una enorme hernia en el estómago. La madre de Jenifer intenta hablar en español con personal de protección civil municipal de Tapachula para pedirles ayuda. Pero ellos nada pueden hacer.
“Dice la señora que ha tenido fiebre, le dieron paracetamol y una infección, desconozco que tipo de infección sea. Por eso le mandaron a hacer unos estudios. Lo que salga en estos estudios le van a dar el tratamiento a la nena, esto como es una hernia, ella va a necesitar una cirugía”, comentó Rolando Muñoz, de Protección Civil de Tapachula.
Decenas de niños africanos y haitianos que llevan más de un mes viviendo en pequeñas casas de campaña, con temperaturas de hasta 35 grados centígrados, afuera de la estación migratoria Siglo XXI enfrentan problemas de salud.
“La mayoría presentan lo que es fiebre, cuadros diarreicos. Tenemos varios niños, ahora si con lo que le llaman piojos, pero es también por falta de aseo, las condiciones en que están viviendo no son las adecuadas, no comen, a veces beben poca agua, deshidratados”, agregó Rolando Muñoz.
Afuera únicamente se encuentra la ambulancia de Protección Civil Municipal y dos técnicos que no tienen la capacitación para atender a los enfermos. Aquí no hay médicos, mucho menos medicinas.
-¿Niños enfermos?
“Claro, tienen paludismo, tengo la persona y tengo cólera, varias influenzas. Ni una ayuda, ni agua, comida, medicamento, ayuda, no ayuda nada, nadie”, dijo Maketa Zedrick, migrante africano.
Ninguna instancia gubernamental federal o del estado les ha proporcionado apoyo. Muchos llevan semanas sin poderse bañar y tienen que pagar 30 pesos porque les renten un baño.
“Somos migrantes, el migrante no tiene dinero, no tengo plata, por acá si cayó suba, inmigrante duerme de pie, estamos pasando mal”, añadió Maketa Zedrick.
Desesperados por la falta de atención, mujeres embarazadas, con los niños enfermos, se sentaron en las puertas de la estación migratoria y durante horas impidieron el acceso de los autobuses que transportaban a migrantes que fueron detenidos en el norte del país.
“Es mucho la persona de África, mucho las nacionalidades de Camerún, Haití, Congo, Bangladesh y muchas las personas. No quieren dar papeles, un salvoconducto a la gente por eso la gente está acá”, apuntó Yoyo Didi, migrante africano.
Elementos de la Policía Federal y del Instituto Nacional de Migración intentaron introducir por la fuerza a los migrantes que venían en los autobuses, esto generó un conato de enfrentamiento.
FOTO: Los migrantes africanos están desesperados por falta de atención. (Reuters)
Los africanos se quejan de que las autoridades migratorias atienden solo a los cubanos, porque traen dinero.
“Queremos ser igual, porque los cubanos entran, queremos ser directos, igual, ellos todos los días, nosotros 3 semanas, ya estamos cansados de aquí, queremos documentos para irnos de aquí”, dijo una migrante haitiana.
Mientras los cubanos rentan habitaciones de hotel, comen en restaurantes, comparan en supermercados, los africanos viven a la intemperie afuera de la estación migratoria Siglo 21 y apenas tienen para comer unas cabezas y patas de pollo.
Con información de Fátima Monterrosa y Adrián Tinoco
LLH
