CRIMEN Y SEGURIDAD

Niños que fueron víctimas de trata reciben apoyo en refugio para rehabilitación

“Me amarraban, me vendaban los ojos, me quitaban la ropa, me acostaban en la cama y me hacían muchísimas cosas”, dice Luis Armando Campos, víctima de prostitución. A la edad de 15 años, Luis Armando Campos fue prostituido por un hombre que ofreció darle casa y apoyo económico.

Me decía que me dejara tocar los pies, que me dejara tocar, que me desnudara, que me fuera a acostar a la cama para que él me hiciera lo que quisiera”.

El sujeto creó una página en internet para ofrecer al menor a cambio de dinero.

Ahí ponía fotografías mías y al pie de la foto ponía: Luis Armando Campos, 15 años, Tampico, Tamaulipas. Estoy a tus órdenes para complacer todas tus sesiones. Entonces, ahí empezó a venderme con otras personas que tenían esos gustos. Llegaban clientes que lo contactaban mediante esa página”.

Luis Armando Campos logró escapar de las redes de prostitución.

Niños que fueron víctimas de trata reciben apoyo en refugio para rehabilitación (Noticieros Televisa)

Este es el primer refugio para varones, menores de edad, en México. Aquí se encuentran niños que fueron obligados a prostituirse. Ante la indolencia de la propia familia, no tuvieron a donde ir.

Ellos son 2 de las 4 víctimas del exregidor de Torreón, Francisco José Meléndez, actualmente vinculado a proceso por el delito de corrupción de menores equiparable a violación.

Atraía a estos niños hacia su alberca, para que se fueran de pinta en la secundaria y los convertía en víctimas de trata de personas. Abusaba de ellos y les sacaba fotos y hacia pues, realmente un comercio de niños varones, tenía alrededor de 25, de 9 a 16 años”, explica Rosy Orozco, de la Comisión Unidos contra la Trata.

En colaboración con la Fiscalía de Coahuila, la Fundación “Comisión Unidos contra la Trata” mantiene a estos niños en un lugar seguro. Su ubicación es confidencial.

En muchos refugios que no están especializados en trata, estos niños podrían ser victimizados”, dice Rosy Orozco.

El refugio cuenta con todo lo necesario para mantener a los menores bajo supervisión.

Miriam Marmolejo Castillo, psicóloga de acompañamiento, señala: “Que más que llamarlo refugio yo lo llamaría una casa de seguridad, de esperanza, de restauración”.

Los menores reciben atención especializada las 24 horas del día.

Poco a poco han dejado de ir tomando menos medicamentos, pero en un principio había una ansiedad y un insomnio terrible de todo lo que vieron estos niños”, explica la psicóloga de acompañamiento Miriam Marmolejo Castillo.

Los niños fueron inscritos en una escuela. La psicopedagoga y los cuidadores están al tanto de sus necesidades.

Ellos no visualizan en qué situación tan grave estaban hasta que tú les desmenuzas el hecho de que eso se llama abuso o violación”; dice la psicóloga Miriam Marmolejo Castillo.

Su evolución ha sido muy favorable. En poco tiempo socializaron en la escuela, su aprovechamiento y habilidades son destacables.

En el área académica, en el área emocional, ellos ya disminuyeron la depresión”; afirma la psicóloga Miriam Marmolejo Castillo.

Rosy Orozco, de la Comisión Unidos contra la Trata, expone que “uno de ellos, desde los 5 años era víctima de su propia familia, que lo llevaba a una cárcel en donde lo vendían a los reclusos para que abusaran de él”.

Aquí han encontrado un hogar. Se sienten queridos, han recobrado la confianza en los adultos.

Ellos ahora pueden sonreír fácilmente. Yo les veo el futuro de una reinserción en la sociedad nuevamente. Yo creo que lo están haciendo muy bien. Ellos tienen toda la voluntad de querer salir adelante”, señala Miriam Marmolejo Castillo, psicóloga de acompañamiento.

Cuentan con todo el apoyo de autoridades y especialistas como lo tuvo Luis Armando, quien ahora como adulto puede hablar de lo que vivió.

“Para mí era muy fácil decir lo olvido y ya. Hay muchas personas que pasaron por lo mismo y no se han atrevido a hacerlo, a denunciar, a hablar, a decir. Yo lo que quiero es denunciar porque quiero paz, quiero tranquilidad”, dice Luis Armando Campos, víctima de prostitución.

Con información de Santos Mondragón

MLV