La tercera ronda de renegociación para la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) “avanzó con propuestas más concretas en la mesa técnica; ya empieza a verse el estilo de las propuestas de cada uno de los países y ya tenemos un capítulo cerrado, que es el de las PyMES, y avances importantes en cinco o seis capítulos más”, explicó Mosiés Kalach, director del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales del Consejo Coordinador Empresarial y coordinador del llamado ‘cuarto de junto’ en la negociación.
En entrevista para Despierta con Loret, Kalach Mizrahi destacó que los otros temas en los que se ha avanzado son mejora regulatoria, telecomunicaciones, temas ambientales y ya empezaron a poner propuestas laborales en la mesa.
Anticipó que “la cuarta ronda de negociación se está preparando y parece que será más interesante, con más sustancia, con muchas propuestas que hemos venido esperando; muchas son de temas difíciles y duros”.
El empresario reconoció que ignora “si va a ser la más dura de las rondas, pero sin duda será la que marcará un parteaguas, porque veremos todas las cartas sobre la mesa para tener una imagen completa de por dónde se va a ir el Gobierno”. Esta ronda, insistió, “marcará cuál va a ser la estrategia”.
Moisés Kalach Mizrahi destacó que aún “se puede descarrilar la renegociación”. Explicó que “las propuestas del equipo estadounidense tienen la línea que ha marcado su presidente” y aclaró que “es la línea de la Casa Blanca, pero no de los empresarios y los industriales. Me parece que hay que separarlo, por un lado tienes a los empresarios y al Congreso y luego tienes al presidente Trump y su equipo, y esa línea viene de ahí”.
De acuerdo con el integrante del CCE, “hay temas que sí avanzan y en los que hay coincidencias, hay intereses donde estamos muy alineados y hay beneficios para los tres países”, por lo que “no creo que sea el caso” que el equipo esté preparando el terreno para dejar la negociación.
“Creo que legítimamente estamos tratando de llegar a una buena negociación, donde no siempre hay convergencia de ideas, pero en la tercera ronda había 700 personas trabajando por alcanzar acuerdos”.
Para Kalach Mizrahi, “el equipo estadounidense no se puso más duro, sino que llegó con propuestas concretas que empiezan a marcar la línea de lo que han venido señalando en los últimos seis meses; no hay sorpresas, son del corte proteccionista con el estilo que los ha marcado y es mejor que estén sobre la mesa de una vez, para saber si vamos a poder llegar a algo”.
El empresario delineó que “Canadá tiene intereses particulares, trae una agenda más social, más progresista, más hacia temas de ambiente, indígenas, además de los temas laborales”.
México “es muy pragmático, el equipo está viendo todos los temas; también nos interesa la equidad de género y también nos importan los pueblos indígenas o la parte laboral”. Además, dijo Moisés Kalach, “estamos tratando de tomar las cosas de manera pragmática empujando un calendario”. Estados Unidos “mantiene su corte proteccionista”.
Si, en este contexto, Estados Unidos decidiera terminar el acuerdo, “vamos a tener nuestras instituciones y nuestro país; tenemos la relación comercial con Canadá, tenemos tratados con otros 45 países fuera de Estados Unidos y tenemos que seguir, no es lo ideal, pero tenemos que saber que es una posibilidad”, por eso “hemos hablado de un plan B, que se está trabajando, aunque, insisto, no es lo deseable”.
Moisés Kalach subrayó que “la mesa técnica avanza y estamos llegando al momento de poner los puntos duros sobre la mesa y vamos a ver de qué se tratan”. Por lo pronto, “en la parte política seguimos trabajando con los aliados, para asegurarnos de que el costo de salirse sea alto; seguimos sensibilizando a las partes, encareciéndole a Trump la decisión de salirse”, en pláticas con “empresas que tienen inversiones en los tres países, con bloques NAFTA, como las energéticas, las mineras, donde el interés económico está muy alineado”.
Kalach Mizrahi se dijo convencido de que “aumentó la dureza de las partes técnicas, pero se puede resolver”.
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