La agenda de discusión para la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no tiene “tan claro el calendario”, pero “contribuye a tener mayor certeza y claridad”, afirmó Moisés Kalach, quien encabeza el “Cuarto de junto”, del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
En la mesa de Despierta con Loret, Kalach subrayó: “sabemos que la primera ronda se llevará a cabo el 16 de agosto; esta semana tendremos más claridad sobre el calendario, pero estamos preparados para lo que venga”.
Moisés Kalach afirmó que en el CCE han implementado “un paraguas”, en el que “participamos todos los empresarios”. Destacó que los empresarios se han preparado “con unión; tenemos una estructura sólida que abarca al sector agropecuario, al manufacturero, al financiero, a todos los sectores empresariales del país”.
El representante de los empresarios informó que se prepararon para el momento de la negociación “estudiando mucho, haciendo escenarios con especialistas en comercio exterior, escenarios fáciles, difíciles, ofensivos, defensivos, para hacer frente a la negociación”.
Kalach Balas reconoció que, al principio de la administración de Donald Trump, con los mensajes sobre el comercio con México, “hubo preocupación; nos costó trabajo entender el camino a seguir”, pero “hicimos una buena estructura, el liderazgo de todos los sectores se unió y eso nos ayudó a navegar”.
El empresario ubica dos momentos críticos en este proceso; el primero, cuando el presidente Enrique Peña Nieto canceló la reunión con el presidente Donald Trump; el segundo fue cuando el presidente de Estados Unidos advirtió, por Twitter, que no dudarían en abandonar el Tratado de Libre Comercio. “Fueron momentos críticos, pero diferentes, en el primero, porque no estábamos directamente involucrados, pero el segundo sí fue un aviso que nos puso a trabajar”, detalló. La estrategia implementada “fue ganar simpatizantes que hablaran bien de México”.
Moisés Kalach describió que el día que Trump amagó con renunciar al TLCAN “fue un día negro, un miércoles de mucho caos, pero comprobó que la estrategia funciona, que el tratado ha sido bueno para los tres países, principalmente para Estados Unidos y sus compañías”.
El empresario recordó que se construyó “una red con empresarios, actores activos, instituciones, cámaras de comercio, gerentes de compañías”; a esa “red de aliados la fuimos sensibilizando con mejor información, y eso fue lo que se movilizó y le hicieron darse cuenta [a Trump] de la importancia del tratado”.
Sin embargo, pidió tomar en cuenta que “el presidente de Estados Unidos puede decidir qué pasa con el tratado y nosotros tenemos que ganar aliados” para que defiendan el acuerdo. Hasta ahora, “la respuesta ha sido positiva”; algunos de los aliados “quieren modernizar cosas, y estamos de acuerdo”
Admitió que “quisiéramos un buen acuerdo” y señaló que “ojalá sea pronto, no sólo por la sucesión, sino porque la certeza en los negocios se traduce en inversiones” y, aun cuando “los congresos se tarden, se activarán las condiciones del tratado, dando certeza para las inversiones”. Moisés Kalach Balas sentenció: “a nosotros nos conviene ir con ese calendario”.
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