ECONOMíA

Moody’s ve presiones en perspectiva de calificación soberana de México

Los fuertes apoyos financieros que requiere Petróleos Mexicanos (Pemex) y los cambios en las políticas públicas del nuevo gobierno generan presiones sobre la perspectiva de la calificación soberana de México este año, advirtió Moody’s Investors Service.

El analista soberano de México, Jaime Reusche, dijo al respecto: “Sí vemos la posibilidad de que se mueva la perspectiva este año en relación con la nota soberana de México, actualmente en A3 con perspectiva estable, pero descartó que el país pierda el grado de inversión.

En conferencia telefónica desde Nueva York, expuso que otro factor que presiona la perspectiva de la nota soberana de México es la desaceleración que muestra la economía nacional este año, por lo cual la calificadora recortó su estimación de crecimiento para este año a 1.7%, desde el 2.2% previo.

Señaló que Moody’s ve presiones sobre la perspectiva de la calificación de México y es posible que la mueva este año, y en el caso de la nota soberana “se podría mover o mantener este año o el próximo, dependiendo de la evolución de las preocupaciones que tiene sobre el país y la respuesta de las políticas públicas a estas.

“Sin duda si hay preocupación sobre la calificación soberana, no descartamos la posibilidad de mover la perspectiva este año o de tomar acciones crediticias dependiendo de la respuesta de las políticas públicas, argumentó.

Reusche acotó que la preocupación está sobre todo sobre la calificación soberana de México, debido al creciente apoyo que daría a Pemex a partir de 2020 y hacia adelante, “lo cual gira el foco de preocupación de la calificación de Pemex, a la calificación del soberano.

No obstante, aclaró que Moody’s no anticipa que México pueda ubicarse debajo del grado de inversión, pues tiene una buena solvencia, mientras que en el caso de Pemex, la posibilidad de perder el grado de inversión se centra en el apoyo que pueda darle el soberano.

Si bien existe presión mayor sobre el soberano en este momento, esto no implica que Pemex está totalmente fuera de peligro, pues eso depende del apoyo que reciba por parte del gobierno, añadió.

Si este apoyo es muy fuerte, Pemex estaría a salvo, pero la calificación soberana podría sufrir, pero si el apoyo es ligero, el panorama sería complicado para la empresa petrolera, pues sus requerimientos financieros están entre 10 mil millones y 14 mil millones de dólares al año.

No obstante, en 2020 las amortizaciones de deuda aumentarán fuertemente a nueve mil millones de dólares y con pagos de intereses de cuatro mil millones de dólares, además de gasto de inversión.

Para este año, dijo, con el apoyo que el gobierno ha dado a Pemex, se ha cubierto una parte de los requerimientos de financiamiento de la empresa, pero no descartó que el soberano tenga que dar un mayor apoyo en 2019, en vez de que la petrolera utilice los ocho mil millones de dólares que tiene disponibles en líneas de crédito.

De acuerdo con las estimaciones de Moody’s, si Pemex requiere apoyo del soberano durante los próximos tres o cuatro años, la deuda pública del país subiría de 35 a más de 40% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que complicaría mantenerla calificación del país en A3.

“La presión está sobre ambas calificaciones, pero más sobre el soberano, si es que el apoyo es forzoso y si es que están comprometidos con apoyar a Pemex en el mediano plazo, subrayó el analista de Moody’s.

Consideró que las autoridades mexicanas enfrentan un “trilema con Pemex: tratar de costear el apoyo a la empresa, mantener la prudencia y responsabilidad fiscal y su agenda de desarrollo con gastos sociales y de inversión.

Para 2020, apuntó, prevé una aceleración en el crecimiento económico a 2.0%, ante la nueva reorientación del gasto público, a través de inversiones y transferencias a programas sociales que apoyarán el consumo privado, aunque sería una mejora temporal, pues hay cierta preocupación acerca de la sostenibilidad de ese crecimiento.

Con información de Notimex

HVI