Migrantes se acaban en promedio un par de zapatos o tenis a la semana

Hasta este domingo algunos migrantes han caminado solo en nuestro país, casi mil 500 kilómetros en nuestro país, desde la frontera con Guatemala hasta Irapuato.

En promedio un par de zapatos o tenis a la semana.

 -¿Y los zapatos?- Se rompieron. Tres pares y los tres se han ido”, dijo Vladimir, migrante salvadoreño.

Totalmente destruidos, los 4 pares de zapatos que he usado, totalmente desarmados, porque el agua, tanto caminar. Deshechos, totalmente deshechos”, reconoció José Guaraona, migrante hondureño.

-¿Cuántas semanas has caminado con ellos?- Sólo como tres semanas, me los quito y los cambio”, afirmó José Luis Martínez Cárdenas, Migrante hondureño:

(Foto: Notimex)

Al no contar con un sitio para lavar, ni tiempo para el secado, los migrantes usan y desechan ropa de todo tipo, aunque a algunas prendas le guardan especial cariño.

-¿Quién te lo dio?- La verdad no sé, estaba ahí la ropa y lo agarré y me lo puse. -¿A qué ciudad de Estados Unidos quieres llegar?- A Houston. -¿Si llegas a Houston, te vas a ir con todo y tu mameluco?- Me voy con mi mameluco”, indicó José Martínez, migrante hondureño.

José Martínez, migrante hondureño, viaja desde hace un mes en la caravana y hace tres semanas encontró entre la ropa en donación un mameluco para él y otro para su hijo.

(Foto: Notimex)

Sin imaginar lo útiles que les serían, José guardó los mamelucos y a partir de su estancia en Querétaro, donde la temperatura de madrugada no supera los 10 grados centígrados, José utilizó ambas prendas.

-Para el frío, ¿qué tal?- Excelente, muy caliente. -¿Lo vas a dejar por ahí en el camino o te va a acompañar hasta Estados Unidos?- A ver hasta dónde aguanta él. -¿Ya te habías puesto un mameluco alguna vez?- No, es primera vez. -¿Qué se siente?- Caliente, muy caliente, a gusto”, reconoció.

Este domingo, con el frío del amanecer, José vistió a su hijo con su mameluco y él también, y salió para conseguir “aventón” en un tráiler.

En el primer tráiler que aceptó subir a los migrantes, José subió como pudo, mientras su esposa, con su hijo en brazos, lo observaba.

(Foto: Notimex)

Llegan migrantes a Puebla, aún no deciden si mañana van a la capital

Después de 10 horas de camino en el interior de cajas de trailers, la segunda caravana de migrantes centroamericanos inició su llegada a Puebla de Zaragoza, en donde fueron recibidos en cuatro albergues instalados en parroquias católicas.

Algunos de ellos no habían comido desde el inicio de su periplo esta mañana, así que recibieron con gusto los alimentos consistentes en arroz, pollo frito, ensalada de atún, huevo con jamón y chicharrón en salsa verde.

Walter, de 26 años, proveniente de Honduras señaló que el calor dentro de las cajas por algunos momentos fue insoportable, lo que se sumó a la debilidad por no haber comido, sin embargo, el grupo mantiene las fuerzas para llegar a la capital del país.

Vecinos de las colonias aledañas a las parroquias, el gobierno municipal y diversas universidades participaron, desde la semana previa, en la colecta para dar a los migrantes alimentos, ropa, servicios médicos y dentales, de acuerdo con el párroco Gustavo Rodríguez.

David, el coordinador de la caravana y miembro de la organización Pueblo Sin Fronteras, dijo que el camino de 415 kilómetros fue más largo de lo esperado en las cajas de los vehículos de carga.

Pese a la distancia y a las horas de viajes dijo que no se registraron incidentes mayores, sólo una mujer joven se desmayó y fue atendida por una ambulancia, reconoció que están cansados y no saben si mañana iniciarán su camino rumbo a la Ciudad de México o descansarán un día más.

Con información de Francisco Santa Anna y Notimex.

FSR