La tensión entre los habitantes de Huixtla y los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos crece conforme llegan más caravanas.
La incesante llegada de migrantes extranjeros ya generó molestia e irritación social en Chiapas.
Al principio eran bienvenidos. Ahora son rechazados y hasta vistos como un riesgo para la salud y la tranquilidad social. Vecinos y comerciantes ya no quieren apoyarlos.
“Porque viene gente maleante. Se van unos, pero se quedan los maleantes. Muchos asaltos robos a tiendas”, reveló Versaín Borrales, habitante de Huixtla.
“Ahorita ya se lo agarraron de planta. Seguido quieren estar entrando y como ya ahorita no se les está dando ayuda, hasta eso se molestan”, comentó Selene Niño, habitante de Huixtla.
Que ya no entren a Huixtla: Alcalde
A tal grado ha llegado la inconformidad ciudadana que el alcalde de Huixtla ha propuesto que las caravanas de migrantes ya no entren al municipio.
“Desde un inicio hubo el apoyo total de la ciudadanía, pero conforme se iban dando frecuentemente pues ya causó molestia, he sugerido yo por ahí, con varias autoridades, que se hagan albergues temporales fuera de la ciudad para no causar un conflicto o un confrontamiento con la ciudadanía”, comentó José Luis Laparra, alcalde de Huixtla, Chiapas.
En Tapachula las cosas no están mejor. Los apoyos ciudadanos a los albergues para migrantes se han reducido drásticamente, comenta Olga Sánchez. En el albergue que dirige actualmente duermen unos 500 migrantes.
“Nosotros vendemos pan en las iglesias y ya no se vende como antes porque se sabe que es para ayudar al migrante”, dijo Olga Sánchez.
De todas partes
Los migrantes extranjeros que llegan a Chiapas ya no son únicamente centroamericanos. Ahora también hay africanos, asiáticos, cubanos y haitianos, principalmente.
Está situación incrementa los riesgos de una emergencia sanitaria, dice el director de Salud de Huixtla.
“Sí, por supuesto, que el flujo de migración, de migrantes de todos lados, implica un riesgo para la salud”, comentó Francisco Javier Ávila, director de Salud Municipal en Huixtla, Chiapas.
Hace dos meses más o menos estuvo muy fuerte lo del sarampión, lo de la varicela y el dengue.
Guyena es una migrante haitiana que llegó hace dos semanas a Chiapas. Dice que al principio les regalaban agua. Ahora tienen que comprarla.
“Para que uno se lave tú tienes que pagar 10 pesos. si uno no tiene 10 pesos queda con ropa sucia. ahora no hay nada. nada. Si yo no trabajo ¿de qué voy a comer?”, dijo Guyena, migrante haitiana.
Con información de Óscar Hernández.
LLH
