La caravana de migrantes centroamericanos que ingresó a México de manera ilegal el viernes pasado, llegó a San Pedro Tapanatepec, Oaxaca, este domingo.
A las cuatro de la mañana, cerca de 600 personas abordaron diez autobuses que les ofreció una iglesia evangélica para hacer su traslado más rápido desde Huixtla, Chiapas a Oaxaca.
En el municipio de Chahuites, la Policía municipal impidió el acceso de los migrantes y los invitó a seguir caminando hasta San Pedro Tapanatepec, donde se instalaron.
En Huixtla, otro grupo de 800 migrantes, luego de esperar por cuatro horas la llegada de más autobuses, se cansó y decidió emprender la caminata.
Autoridades municipales de Escuintla y Acacoyagua les dieron agua y los apoyaron con traslado vehicular en camionetas, remolques y hasta ambulancias.
Tenemos este módulo estratégico con agua, algunas frutas, dulces para los niños y medicamentos”, informó Pedro Blanco Martínez, secretario municipal de Protección Civil.
Mientras un grupo de 600 personas pernocta en Oaxaca, otro grupo mayor de 800 personas continúa recorriendo la zona costera de Chiapas para alcanzar a sus compañeros en esta travesía que tiene como destino el norte del país para intentar cruzar a los Estados Unidos.
Con información de Juan Álvarez
LHE
