El jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo aseguró que, así como México se unió ante la amenaza arancelaria de Estados Unidos, debe estar unido para salvar a Pemex.
Explicó que, debido a la baja perspectiva de las calificadoras, el Gobierno tiene un año para generar confianza en esta empresa productiva del Estado.
“Pemex es una obligación, no es un deber, Pemex es parte del corazón y parte de la Columna vertebral, pero queremos todos un Pemex más productivo, con menos corrupción, más eficaz […] Tenemos un año y vamos a hacer todo lo posible, como lo hicimos ahora para defender el T-MEC y los aranceles, es hacer todo lo posible para que México, para que Pemex regrese a su grado de inversión, para que México empiece otra vez a ganarse la confianza de todos”, conminó.
Cuestionado por empresarios y banqueros, reiteró que la decisión de cancelar el Aeropuerto en Texcoco fue definitiva y aseguró que habrá nuevas oportunidades de inversión para el sector privado, aunque por ahora, no podrán participar en Santa Lucía.
“A Texcoco no se le mueve ni el pelo, para ser claros y honestos. Santa Lucía se está proponiendo como una inversión pública, todavía no se ha abierto ni se ha considerado abrir a la inversión privada. Pero déjenme abundar, Santa Lucía va y va para adelante, el proyecto está bastante bien hecho. Pero antes de Santa Lucía, se va a fortalecer la Ciudad de México y Toluca y eso nos da 10 años […] Ahí si yo diría que estamos proponiendo en el Consejo abrirlo a la inversión privada”, explicó.
Durante su participación en la Reunión Anual de Consejeros Nacionales de BBVA Bancomer dijo que, aunque la negociación de la semana pasada en Washington generó una situación de shock en México, también fue una oportunidad para demostrar el compromiso del Presidente Andrés Manuel López Obrador con el libre mercado y la generación de condiciones para convertir al país en un paraíso de inversión.
(Con información de Carolina Altolaguirre)
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