Peñón” y “Aragón” son dos de los 25 perros que el Metro de la Ciudad de México está dando en adopción, luego de haber sido rescatados de morir electrocutados o atropellados por un convoy en la zona de vías.
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“El que da aviso es a veces el usuario o propiamente el conductor o el inspector, una vez que avisan, personal de Protección Civil del Metro los rescata y los lleva allá con nosotros, al Centro de Transferencia”, indicó Gabriela Villicaña, responsable del Centro de Transferencia Canina del Metro CDMX.
En el Centro de Transferencia Canina del Metro, en Azcapotzalco, los perros reciben atención veterinaria y un nombre dependiendo de la estación en la que fueron rescatados.
“Taza, que fue rescatada de talleres Zaragoza; Tenca, que fue rescatada en Tlaltenco; Quiz, que fue rescatada en Muzquiz; Villano, que no crean que es villano, es muy buen perrito y él fue rescatado en Villa de Aragón”, señaló Gabriela Villicaña, responsable del Centro de Transferencia Canina del Metro CDMX.
En los últimos 5 años, el Metro de la Ciudad de México ha rescatado de las vías a 429 perros, 376 han sido adoptados y 30 han sido reclamados y han logrado regresar con sus familias humanas.
“Hoy estamos muy contentos de promover la adopción para que se adopte y no se compre a un perrito, a una mascota”, dijo Anónimo, Presentador de evento del Metro.
En el Día Mundial del Perro, el Metro realizó un festival en la glorieta del Metro Insurgentes para promover la adopción.
“Desconocía que en las vías del Metro los rescataban, pero qué bueno que sí los están apoyando”, externó Alondra, donadora.
El evento fue aprovechado para el lanzamiento del primer “croquetón”, con el que se busca reunir alimentos y otros enseres en beneficio de los perros rescatados.
“Lo vi en Instagram, de repente vi que iba a ser hoy y pregunté si alguien quería venir conmigo para venir a donar comida”, refirió Viviana, donadora.
“Traje un costal de croquetas, son 25 kilos, teníamos ahí un ratito libre y aprovechamos para poder ir a comprarles algunas croquetas”, añadió Fernanda, donadora.
Con información de N+ Carlos Guerrero
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