CONFLICTOS ARMADOS

Marchan en Nicaragua para apoyar a obispos llamados ‘golpistas’

Miles de nicaragüenses, en su mayoría católicos, marchan por las calles de Managua en solidaridad con los obispos de la Conferencia Episcopal, mediadores y testigos del diálogo con el que se espera superar la crisis en el país y que fueron tildados de “golpistas” por el presidente Daniel Ortega.

La manifestación, convocada por el denominado “Movimiento de Autoconvocados”, partió de la rotonda Jean Paul Genie, en el sur de la capital, y culminará en los alrededores de la Catedral Metropolitana de Managua.

Durante la denominada “Peregrinación por nuestros obispos, defensores de la verdad y la justicia”, los manifestantes ondean la bandera de Nicaragua y la de la Iglesia Católica, además exigen justicia por los muertos (entre 295 y 448) que han dejado las protestas contra el Gobierno de Ortega.

La peregrinación en honor a los obispos y sacerdotes es precedida por la imagen de la virgen de Cuapa, considerada milagrosa por los católicos nicaragüenses y que en 1980, cuando Nicaragua afrontaba el inicio de una guerra civil, según la creencia, se le apareció a un sacristán Bernardo Martínez.

La virgen de Cuapa se apareció al vidente y padre fallecido Bernardo -quien después se ordenó de sacerdote- el 8 de mayo por primera vez y después los días 8 de junio, 8 de julio y la cuarta vez el 13 de octubre de 1980.

En esas fechas Nicaragua afrontaba una guerra civil que concluyó con la desmovilización de más de 22,000 antiguos “contras” antisandinistas durante el Gobierno de Violeta Chamorro (1990-1997).

Durante la marcha de este sábado, los feligreses entonan cánticos y rezan el Santo Rosario, y gritan, además “Nuestra Iglesia quiere justicia y paz”, “¿Quién causa tanta alegría?, la virgen María”, “La primera que quiere la paz, es la Iglesia”, mientras personas a bordo de vehículos tocan sus bocinas en señal de respaldo.

A la manifestación se sumó un grupo de médicos que se solidarizó con los obispos y con la destitución de unos 40 galenos estatales por haber atendido a personas que protestaban contra el Gobierno en el noroeste de Nicaragua.

Entre otros, los nicaragüenses gritan vivas a los obispos ante lo que consideran campaña de desprestigio emprendida por el presidente Ortega en contra de la Iglesia Católica, que ha incluido profanación de parroquias y agresiones verbales y físicas.

Ortega ha arremetido contra los obispos nicaragüenses, que ya han sido objeto de ataques físicos por parte de grupos oficialistas, y los ha llamado golpistas por haber planteado el adelanto a marzo de 2019 de las elecciones previstas en el 2021 en Nicaragua.

Nicaragua atraviesa la crisis más sangrienta desde la década de los años de 1980, también bajo la Presidencia de Ortega.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) han responsabilizado al Gobierno de Nicaragua por “asesinatos, ejecuciones extrajudiciales, malos tratos, posibles actos de tortura y detenciones arbitrarias”, lo que Ortega ha negado.

Las protestas contra Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, comenzaron el 18 de abril pasado, por unas fallidas reformas de la seguridad social y se convirtieron en una exigencia de renuncia del mandatario.

MILES DE SANDINISTAS MARCHAN EN RESPALDO A ORTEGA Y CONTRA “GOLPISTAS”

También miles de sandinistas salieron una vez más a las calles para respaldar al presidente Daniel Ortega y expresar su repudio a los “golpistas”, como el mandatario tilda a los que protestan contra su Gobierno desde el pasado 18 de abril, una crisis que ha dejado varios centenares de muertos.

A pie, en motocicletas y en vehículos, miles de simpatizantes del Gobierno, entre ellos empleados públicos y miembros de la Policía Nacional, marcharon desde las afueras de la estatal Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua) hasta la Rotonda Hugo Chávez, en un recorrido de unos 5 kilómetros.

Durante esa caminata, convocada por el Gobierno para exigir justicia para las víctimas que ha dejado la crisis que atraviesa el país desde hace más de tres meses, expresaron su respaldo a lo que denominan un “proceso revolucionario encabezado por el comandante Daniel Ortega”.

“Estoy aquí para apoyar al comandante, el único presidente que ha sabido sacar adelante el país y eliminar la corrupción”, dijo a Carlos Daniel Gámez, uno de los participantes en la marcha.

“Los golpistas asesinos quieren acabar con Nicaragua, pero no lo vamos a permitir”, agregó.

Asimismo, exigió justicia para las víctimas que ha dejado la crisis, cuyas muertes, según dijo, han sido provocado por “ellos mismos”, en alusión a los opositores, “para sacar al comandante del poder”.

Martha Acosta, otra de las manifestantes oficialistas, expresó su respaldo al mandatario y al “proceso revolucionario que intentó ser destruido por grupos terroristas financiados por la derecha nicaragüense”.

Durante la marcha de este sábado, los manifestantes gubernamentales portaban banderas roja y negra del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y la de Nicaragua, además cargaban rótulos de “Queremos la paz” y demandaban justicia para las víctimas.

El Gobierno, a través de la vicepresidenta y primera dama de Nicaragua, Rosario Murillo, dijo el pasado día 20 que los opositores se mataron entre sí, en el marco de las protestas antigubernamentales que comenzaron el pasado 18 de abril, para responsabilizar al presidente Ortega.

La dignataria dijo que después de tres meses de iniciada la crisis, “la culpa sobre esos muertos recae sobre el golpismo terrorista y criminal en Nicaragua”, como califica a los detractores al Gobierno.

Con información de EFE.
ramg