A lo largo de la historia estadounidense se han utilizado diferentes Biblias, pues cada presidente elige la que usará, lo que en muchas ocasiones se convierte en un símbolo.
Por ejemplo, en 1961, John F. Kennedy juró sobre una Biblia católica, pues profesaba este rito.
En tanto, Lyndon B. Johnson, quien se convirtió en presidente tras el asesinato de Kennedy en Texas, realizó el juramento en el avión presidencial usando una Biblia encontrada en la aeronave.
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En 1989, George Bush padre decidió cumplir con este requisito con la misma Biblia que usó Washington en 1789.
Su sucesor, Bill Clinton, juró en 1993 sobre otra Biblia con valor familiar, pues fue un regalo de su abuela cuando era niño.
En el 2001, George W. Bush cumplió con esta obligación utilizando la misma Biblia que usó su padre 12 años antes, es decir, la de Washington.
En el caso más reciente, el de Barack Obama, en su primer mandato que inició en el 2009, juró con la Biblia utilizada por Abraham Lincoln en 1861.
Tras su reelección, en el 2013, Obama juró en dos ocasiones, primero de manera privada, pues el 20 de enero era fin de semana, usando la Biblia que perteneció a la abuela de su esposa.
Al día siguiente hizo el juramento de manera oficial, usando dos Biblias al mismo tiempo, la de Abraham Lincoln y la del luchador por los derechos civiles, Martin Luther King.
De acuerdo con la Comisión de la Investidura Presidencial, Donald Trump también jurará sobre dos Biblias, una que le regaló su madre cuando terminó la escuela primaria en 1955. La otra será la de Lincoln, que pertenece a la Biblioteca del Congreso y es la misma que usó Barack Obama en sus dos mandatos.
El vicepresidente Mike Pence jurará el cargo con una Biblia que pertenece a la familia del ex presidente Ronald Reagan.
Con información de Juan José Alvarado
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