POLíTICA

Lento conteo de votos genera protestas en Ecuador

La victoria parcial del candidato oficialista Lenín Moreno no le alcanzaría para imponerse en primera vuelta a su principal rival, el exbanquero Guillermo Lasso, cuyos seguidores protestaban este lunes frente al Consejo Electoral por supuestas irregularidades en las elecciones presidenciales de Ecuador.

Con 89,18% de los votos escrutados Moreno obtenía una ventaja de 39,12% seguido de Lasso con 28,30%.

Para que un candidato gane en primera vuelta debe alcanzar más de 50% de los sufragios o al menos 40% y 10 puntos de ventaja sobre su más inmediato rival. En caso de no darse ese resultado habrá una segunda ronda el 2 de abril.

El presidente del Consejo Electoral, Juan Pablo Pozo, dijo que completar el escrutinio llevará entre tres y cinco días y garantizó la transparencia del proceso.
Lasso aseveró en rueda de prensa que “huele mal eso. ¿Cómo se van a demorar tres días por un 12%? Ayer en media hora ya tenía escrutado el 12%” y advirtió que se busca “meterle mano al proceso electoral”.

Moreno, vicepresidente del mandatario Rafael Correa entre 2006 y 2013, aseguró que “vamos a rebasar el 40% pero si eso no ocurriera estamos listos para empezar la segunda vuelta”.

Pero Lasso manifestó: “Le quiero decir que no juegue con la voluntad del pueblo ecuatoriano, todavía nos falta una instancia… saldremos a las calles”.

En medio de la incertidumbre provocada por las ajustadas cifras varios miles de simpatizantes de Lasso llegaron hasta el organismo electoral para exigir transparencia en el conteo. Algunos cientos habían estado de vigilia toda la noche.

El ama de casa Narina Jurado, de 50 años, dijo a The Associated Press que “estoy aquí para luchar con el pueblo porque se respete la democracia… porque la patria surja libre y democráticamente”. La mujer advirtió que planea quedarse en el lugar hasta que se conozcan los resultados oficiales finales.

Los gritos de “Fuera Correa fuera”, “Resultados ya” y “No al fraude” se escuchaban en medio del ondear de banderas ecuatorianas y del partido de Lasso en un ambiente crispado, pero sin violencia. Los manifestantes bloqueaban una de las principales avenidas del norte de Quito y eran apoyados con bocinazos por los conductores de los vehículos que circulaban en las calles cercanas.

“Nos quedamos aquí hasta que sea respetada la voluntad popular. Si los resultados son limpios los vamos a reconocer, si no son limpios nos declararemos en desobediencia civil”, dijo a AP Andrés Páez, candidato a vicepresidente de Lasso, mientras participaba de la protesta frente al organismo electoral.

Al analizar los resultados parciales el analista y consultor político Santiago Nieto dijo a AP que “el presidente Correa no está desgastado lo suficiente como para que el pueblo le dé la espalda” aunque admitió que Lasso encarna la exigencia de la gente de “querer mejores condiciones para vivir el sistema democrático”.

Añadió que la propuesta de gestión del próximo gobierno “no está en la voluntad de los candidatos, sino que estará condicionada por la situación económica nacional y por la influencia del entorno internacional”.

Los resultados favorables al postulante oficialista dejan entrever el bajo efecto que tuvieron las múltiples acusaciones contra su candidato a vicepresidente Jorge Glas. Según una denuncia del exministro de Energía Carlos Pareja, Glas conocía y aprobaba una trama de corrupción en la empresa estatal Petroecuador, lo que Glas ha negado.

HVI