CORRUPCIóN

Juez de Miami niega libertad al expresidente panameño Ricardo Martinelli

Un juez federal de Miami ordenó este martes que el expresidente de Panamá, Ricardo Martinelli, permanezca detenido en confinamiento solitario tras informarle que fue arrestado debido a una orden de extradición emitida por su país.

“El pedido de libertad bajo fianza será denegado en este momento”, manifestó el magistrado Edwin Torres al finalizar una breve audiencia judicial en un tribunal federal del centro de Miami.

Fue la primera audiencia judicial de Martinelli tras su arresto el lunes en la tarde en las cercanías de su casa de la vecina ciudad de Coral Gables. El expresidente está acusado de corrupción y de espiar a adversarios políticos en Panamá.

Martinelli permaneció de pie al lado de su abogado durante la audiencia, con esposas que estaban sujetas a una cadena que rodeaba su cintura. Vestía traje beige de camisola y pantalón de presidiario. Lucía tranquilo, con cabello y barba canosa.

Minutos antes de que el juez informara su decisión, el abogado de Martinelli, Marcos Jiménez, le explicó que su cliente no estaba bien de salud y que en lugar de permanecer aislado prefería que fuera trasladado junto al resto de los presos.

Torres accedió a ofrecerle la atención médica que pudiera necesitar, pero dijo que debía permanecer aislado hasta su próxima audiencia de libertad condicional, el 20 de junio. En esa oportunidad los abogados le explicarán al juez por qué aspiran a obtener su libertad bajo fianza.

Martinelli, quien se desempeñó como presidente de 2009 a 2014, ha negado haber violado la ley y asevera que el caso es una persecución política de su sucesor.

En febrero, los fiscales en Panamá informaron que pidieron ayuda internacional para detener a dos de sus hijos en relación a una presunta asociación ilícita para lavar dinero de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.

Panamá pidió la extradición de Martinelli de 65 años en septiembre a solicitud de la Corte Suprema de Justicia para que enfrentase acusaciones de presunto espionaje contra más de un centenar de personas, entre opositores, líderes sindicales, empresarios y periodistas críticos. Además de los cargos por violación a la intimidad, también se le señala por peculado debido a la pérdida de los equipos con los cuales habría interceptado teléfonos y correos electrónicos.

Algunos querellantes en el caso expresaron que Martinelli no tenía necesidad de esperar un proceso de extradición en Estados Unidos y que debió terminar su autoexilio de más de dos años para que enfrentase a la justicia.

“No era necesario que se pasara la vergüenza de hoy”, dijo la opositora y una de las presuntas víctimas del espionaje, Balbina Herrera, en alusión a la presencia del exmandatario esposado durante la audiencia. “Este es un precedente que debe tomar en cuenta la clase política panameña. No importa cuánto dinero tengas, cuánto poder tengas… no puedes abusar de los derechos humanos de la gente”.

Martinelli, quien hasta hace poco dijo desde Estados Unidos que planeaba participar en las elecciones panameñas de 2019, enfrenta otros casos por presunta corrupción. Decenas de simpatizantes del magnate de los supermercados realizaron por la tarde una manifestación en su apoyo frente a la sede de su partido en esta capital.

FJMM