EDUCACIóN

Joven sirio gana Premio de la Paz Infantil por construir escuelas para refugiados en Líbano

Un joven refugiado sirio ganó este lunes un prestigioso premio internacional por construir una escuela y brindar educación a cientos de niños que huyeron al Líbano para escapar del conflicto.

Mohamad Al Jounde tenía solo 12 años cuando decidió construir una escuela en el campamento de refugiados del Valle de Bekaa, alistar a sus parientes y voluntarios para ayudar a construir el edificio y enseñar una variedad de materias, desde inglés y matemáticas hasta fotografía.

Tres años después, la escuela cuenta con más de 200 estudiantes, algunos de hasta cinco años, varios maestros profesionales y ofrece clases de igualdad de género y clases de alfabetización para refugiados adultos.

Me sentí feliz de ser no solo un maestro, sino también un amigo, y nos hicimos una familia, somos más fuertes juntos”, dijo Jounde, ganadora del Premio Internacional de la Paz Infantil de 2017.

“No se trata solo de enseñar a leer y escribir, sino de brindarles a los jóvenes refugiados un espacio seguro para expresarse”, dijo por teléfono el joven de 16 años a la Fundación Thomson Reuters.

Los ganadores anteriores del premio, lanzado en 2005 por la Dutch KidsRights Foundation, incluyen a Malala Yousafzai, la ganadora más joven del Premio Nobel de la Paz, que recibió disparos en Pakistán en 2012 por parte de los talibanes por defender los derechos de las niñas a la educación.

Como Mohamad, el futuro de Siria depende de sus hijos, y su futuro depende de la educación”, dijo Yousafzai, ahora de 20 años y estudiante en la Universidad de Oxford, en la ceremonia de premiación en La Haya, donde le entregó el premio a Jounde.

La guerra civil siria, ahora en su séptimo año, ha matado a cientos de miles de personas y ha desarraigado a 11 millones.

Más de 2.5 millones de niños sirios son refugiados, de los cuales unos 500,000 viven en el Líbano, dijo KidsRights. Muchos luchan por obtener suficientes alimentos nutritivos o acceder a la atención médica, y casi la mitad de los que tienen entre seis y 14 años no asisten a la escuela.

“Es muy importante darles educación a estos niños, de lo contrario, podrían convertirse en una generación perdida”, dijo Jounde.

Con información de Reuters

HVI