Con 31 votos a favor y tres en contra, la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen de la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2018, el cual será discutido en el pleno.
Se trata, explicó el diputado priista Jericó Abramo Masso, de un dictamen que considera “43,200 millones de pesos más de ingresos que los originalmente proyectados por el Ejecutivo Federal”. Esto, dijo en entrevista para Estrictamente Personal, “permitirá que se garantice un presupuesto de casi 5 billones de pesos”.
Con el dictamen de la Ley de Ingresos, abundó, “se garantiza certidumbre a los mercados y recursos suficientes para enfrentar los daños causados por los sismos y huracanes; se garantiza la reconstrucción, la atención a víctimas, la atención a damnificados”, todo ellos sin “tocar los programas sociales; no se tocaron los programas sociales; no se descobija a nadie”.
Además, explicó Abramo Masso “no se adquirirá más deuda”, porque “los recursos salen de la variedad del tipo de cambio, con el replanteamiento a 18.40 pesos por dólar desde los 18.10 pesos que planteó el Ejecutivo Federal en la carátula del proyecto original que entregó el 8 de septiembre”. También, dijo, “se ajustó el precio del petróleo, que llegó propuesto en 46 dólares por barril y se aprobó a 48.50, estimado del análisis de cómo se comportará en relación de cómo se ha comportado este año”. Esas diferencias, detalló, “nos garantizan el ingreso adicional”.
El dictamen aprobado por la Comisión de Hacienda, afirmó el legislador “tiene visión hacia el futuro y garantiza un crecimiento entre 2 y 3 por ciento para el próximo año”. Destacó que, “en el contexto internacional, seguimos creciendo, mientras otros países están atascados, están parados en su crecimiento económico. En México seguimos creciendo, en los últimos cinco años ha habido un crecimiento sostenido que se refleja en el otorgamiento de créditos, de viviendas, en el creciente consumo para adquirir bienes”. Declaró que “la economía del país ha reflejado solidez, a pesar de lo que muchos esperaban en enero, cuando veíamos un panorama no tan bueno”.
Destacó que la volatilidad del tipo de cambio está relacionada con las negociaciones del TLCAN, “y seguirá la volatilidad mientras se arrecien las diferencias; pero las proyecciones son que México está preparado para seguir incluso si no hay acuerdo; tenemos opciones; si se acaba el TLCAN no quiere decir que se acaba el país; podemos seguir vendiendo, exportando a otros países”.
(Con información de Estrictamente Personal)
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