En la frontera norte de México tampoco ha aumentado el número de retornados, es decir, de migrantes centroamericanos que ya están en proceso de asilo en Estados Unidos.
Por la garita de San Ysidro han estado entrando 100 migrantes al día y ese número se ha mantenido en estos días. En Tijuana, hay proyectos para recibir a más migrantes, pero necesitan financiamiento.
El Cañón del Alacrán es una zona marginada al noreste de Tijuana. Se trata de una afluente que baja hasta la frontera con Estados Unidos; del otro lado termina en un estuario junto al parque de la amistad.
Ahí se encuentra el mayor albergue de migrantes de esta ciudad fronteriza, la iglesia Embajadores de Jesús.
Hace dos años, el pastor Gustavo Banda inició la construcción de un refugio para recibir a los migrantes haitianos que llegaron a esta frontera para pedir asilo humanitario en Estados Unidos.
Estamos ubicados en este momento en lo que conocemos como la pequeña Haití, este pequeño complejo contiene baños, regaderas para los que habitan aquí y los que van a habitar, una cocina comunitaria, un comedor”, explicó el pastor.
Fonna Forman y Teddy Cruz, investigadores de la Universidad de California en San Diego compartían el deseo de ampliar el espacio para recibir a más migrantes; juntos desarrollan un proyecto para la rehabilitación integral del Cañón del Alacrán.
Estamos pensando crear un proyecto de intervención urbana muy integrado con viviendas de emergencias que están conectadas intencionalmente a una serie de incubadores económicos para productividad local para que los inmigrantes puedan iniciar pequeños negocios”, indicó Teddy.
La cuestión más importante que queremos demostrar es que esta región, San Diego y Tijuana somos interdependientes, no son dos ciudades separadas con diferentes agendas”, destacó Fonna.
En la Universidad de California se diseñó una estructura de acero, que será el esqueleto de las futuras viviendas. El pastor la llama Ciudad de Dios.
Lo que vamos a hacer son canchas deportivas, una pequeña clínica, talleres productivos para que todos los que lleguen aquí puedan obtener un empleo y si no saben los vamos a instruir”, agregó el pastor.
El proyecto está en busca de recursos para poder iniciar la obra este año. Se sumaría a la red de albergues en Tijuana, que actualmente está saturada.
El proyecto Ciudad de Dios también tendría impacto en el medio ambiente, especialmente por las corrientes de agua que llegan a Estados Unidos desde este cañón en México.
“Mientras se le ha vendido al público americano la noción de que este territorio está hecho de división y de fragmentación, creo que lo que ha caracterizado este territorio son los flujos sociales económicos, es un poco la solidaridad y que el futuro de esta región y de estas dos ciudades, Tijuana y San Diego, está entrelazado”, señaló Teddy Cruz, investigador de la Universidad de California, en San Diego, Estados Unidos.
Con información de En Punto
LHE
