POLíTICA

Demócrata, al borde de lograr victoria en comunidad pro Trump en Pensilvania

Una diferencia mínima separaba al demócrata Conor Lamb y el republicano Rick Saccone el miércoles de madrugada en su importante elección especial en Pensilvania, donde una candidatura inesperadamente fuerte del novato Lamb puso a prueba la influencia de Donald Trump en un bastión republicano.

Lamb reclamó la victoria ante seguidores entusiasmados pasada la medianoche, aunque aún quedaban por contar muchos votos por correo.

La disputa ha llamado la atención de todo el país como un indicador para las elecciones de media legislatura en noviembre, en las que el Partido Republicano podría ver en peligro sus mayorías en el Senado y la Cámara de Representantes.

Lamb, un veterano de los marines, dijo a sus seguidores que los votantes le habían dado instrucciones de “hacer su trabajo” en Washington. “Misión cumplida”, declaró. Poco antes, Saccone había dicho a sus seguidores que “no ha terminado aún, vamos a pelear todo el camino, todo el camino hasta el final, nunca nos rendiremos”.

Al margen del resultado, y era posible que hubiera un recuento, el apoyo a Lamb en un distrito donde Trump ganó por 20 puntos porcentuales en las elecciones presidenciales sin duda causará ansiedad entre los republicanos en todo el país y renovará los ánimos de los demócratas.

Los partidarios del candidato demócrata al Congreso de Estados Unidos, Conor Lamb (Reuters)

Pasada la medianoche y con todas las circunscripciones contabilizadas, los resultados no oficiales situaban a Lamb por delante del representante Saccone por 641 votos.

Quedaban unos 200 votos por correo y un número indeterminado de papeletas provisionales por escrutar, según responsables electorales.

En una pelea tan ajustada, los partidarios de cualquier candidato pueden pedir un recuento.

Sin embargo, hay estrictos requisitos, como conseguir tres votantes en la misma circunscripción que puedan declarar que se cometió un error o fraude.

Lo que había en juego en la contienda era más político que práctico.

El ganador tendrá que optar a la reelección en apenas ocho meses, y es probable que la circunscripción actual cambie el año que viene.

Sin embargo, el presidente Trump y sus principales aliados han invertido una enorme cantidad de tiempo y recursos a mantener el escaño en manos republicanas.

Con información de AP

HVI