En concreto, el avión Falcón 900 llevó tres contenedores estancos de salvamento que sirven para proporcionar a la dotación del submarino víveres, oxigeno, comida y medicamentos, entre otros materiales, informó la Embajada de España en Argentina en un comunicado.
Esta ayuda se suma a las más de 4,000 personas que trabajan en el operativo de búsqueda -sobre barcos, en aeronaves de exploración o en los cinco puntos logísticos en tierra-, entre personal argentino y de otros países que prestan su ayuda: Colombia, Chile, Perú, Brasil, Uruguay, Reino Unido y Estados Unidos.
Desde el primer momento, según se añade en el texto difundido, la Armada española, a través de la web International Submarine Escape and Rescue Liaison Office está “siguiendo y monitorizando” todo el proceso relativo a la búsqueda y rescate del submarino, “mostrando en todo momento la disposición a colaborar en todo aquello que por parte española se pueda aportar” al operativo.
El submarino desaparecido emitió sus últimas señales en la madrugada del miércoles 15 de noviembre, cuando se encontraba de vuelta de Ushuaia, en la parte más austral de Argentina, hacia la ciudad de Mar del Plata, en la provincia de Buenos Aires.
Autoridades de la Armada argentina advirtieron hoy que el caso del submarino entró en una fase “crítica” en cuanto a la disponibilidad de oxígeno y señalaron que, por el momento, no se estableció “ningún tipo de contacto” con él.
Con información de EFE.
ramg