CONFLICTOS ARMADOS

México y la crisis de Venezuela, dos perspectivas en Despierta con Loret

La crisis en Venezuela suma 95 días de enfrentamientos entre la oposición y quienes apoyan al gobierno de Nicolás Maduro, sin señales de distensión y con mayor polarización. En ese panorama, el Gobierno mexicano convocó a una reunión de la Organización de Estados Americanos (OEA) con miras a encontrar una solución al conflicto.


Para Rafael Fernández de Castro, México no podía pasar más tiempo ignorando la situación, “tenía que entrar para evitar más sufrimiento y derramamiento de sangre”, afirmó en la mesa de Despierta con Loret.

Desde su perspectiva “no violamos la soberanía de Venezuela, sólo tratamos de mediar en el conflicto”, al mismo tiempo, con estas acciones “México se abre al escrutinio internacional y eso es un acicate para mejorar la situación de los derechos humanos en nuestro país”.

En oposición, Gabriel Guerra Castellanos consideró que México no ha actuado correctamente, para empezar, porque “la diplomacia se debe hacer con discreción, no es una actividad para los reflectores”.

Guerra Castellanos afirmó que es correcto que “México tenga un papel activo, que sea interlocutor”, como lo ha sido en otras ocasiones.

Según recuerda el internacionalista, “el papel de México fue vital en la resolución de conflictos centroamericanos en la década de los ochenta y noventa”, pero en esta ocasión no ha sido efectivo. Además, consideró, “pocas organizaciones hay más desacreditadas que la OEA en el mundo; la OEA la última vez que sirvió fue cuando felicitó al primer astronauta que pisó la Luna”.

Además, cuestionó, “en qué se ha ayudado a los ciudadanos venezolanos, si no se sabe ni quién orquestó el ataque al Congreso y es evidente que la tensión es cada vez más creciente”.

Sin embargo, Fernández de Castro insistió en que México no podía seguir ignorando el problema y “hace un año que cambió la línea; así fue como entramos en el apoyo a la solución de conflictos en El Salvador y Nicaragua”.

Reconoció que “la OEA no funciona muy bien, pero con [Luis] Almagro al frente, le está poniendo ganas”.

Gabriel Guerra Castellanos refutó que “hay otras alternativas, no la OEA”, además de que “México jugó papeles de mediación sin recurrir al micrófono”.

Destacó que, en otras épocas, “el conducto de Washington para dirimir conflictos con Cuba era México, hasta que esa tradición se rompió con [Vicente] Fox y [Felipe] Calderón”. Por otro lado, “para ayudar a distender, la mejor manera es tener diálogo con uno y otro, si sales a declarar en favor, se acabó la posibilidad de ayudar”.

Guerra Castellanos consideró que se han cometido errores en la estrategia con Venezuela, “hay quienes piensan que quedando bien, diciendo lo que pensamos que Estados Unidos quiere escuchar, nos anotamos puntos, ésa fue la lógica de ir a pegarle a Cuba, y ya vimos de qué sirvió, porque en ese momento nos distanciamos de América Latina y también de Estados Unidos”.

Para Rafael Fernández de Castro, “es absurdo decir que le hacemos el juego a Washington. Lo de Venezuela, era increíble que no le entráramos, que volteáramos la cabeza en estos momentos”. Reconoció que “cuando gobernaba Hugo Chávez, yo le recomendé a Calderón que no se metiera, pero la situación era diferente en todos los sentidos y ahora no nos queda de otra, tenemos que ayudar a distender”.

 

 

tfo