Este viernes, en sesión extraordinaria urgente, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) discutirá y someterá a votación un proyecto que ordena al presidente Andrés Manuel López Obrador, se abstenga de continuar realizando manifestaciones de naturaleza electoral.
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Esto como parte de una medida cautelar que el Instituto considera procedente para evitar que se vulneren los principios de imparcialidad y neutralidad que podrían poner en riesgo la equidad de la contienda electoral más grande de la historia de México.
El proyecto de resolución, en caso de ser aprobado por los consejeros electorales, solicitará al presidente que se abstenga de pronunciarse sobre los siguientes temas:
- Ejercicio de las prerrogativas de los partidos políticos (financiamiento público y acceso a radio y televisión).
- Vida interna de los partidos políticos nacionales y locales.
- Candidaturas de partidos políticos e independientes (registro, postulación, entre otras).
- Cargos de elección; etapas del proceso electoral federal y locales.
- Frentes, coaliciones electorales, fusiones, alianzas nacionales o locales; plataformas electorales; campañas electorales; estrategias electorales de cualquier fuerza política nacional o local, así como a encuestas de intención de voto o preferencias electorales.
El proyecto explica que “se considera necesario, justificado y urgente” dictar estas medidas cautelares, que también inhibirían conductas de otros funcionarios públicos como gobernadores y alcaldes.
Ejemplifica que el pasado 29 de diciembre, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, en una conferencia de prensa realizó críticas y cuestionamientos en torno a una alianza partidista que competirá en las elecciones de esa ciudad. “Esto es, una conducta similar a la que en esta resolución se reprocha de manera precautoria.”, detalla el proyecto del INE.
Sobre el derecho de libertad de expresión del presidente, el documento precisa que hacerlo durante esta etapa del proceso electoral podría estar restando eficacia a otros derechos y principios electorales, como son el derecho de voto y los principios de imparcialidad, neutralidad y equidad en la contienda.
En consecuencia, se considera que el dictado de una medida preventiva de carácter inhibitoria resultaría en una restricción proporcional y justificada de la libertad de expresión del presidente de la República a cambio del daño que se podría generar.
En los considerandos del documento que el INE discutirá y en su caso aprobará este viernes, reconoce que estas medidas cautelares podrían durar poco tiempo porque corresponderá al TEPJF pronunciarse sobre el fondo de la queja que presentó el representante del PRD, Ángel Ávila.
Con información de Claudia Flores
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