CRIMEN Y SEGURIDAD

Las inconsistencias en investigación de la muerte de Malcolm Latif

Malcolm Latif era nieto de Malcom ‘X’, activista social que luchó junto a Martin Luther King por los derechos de los afroamericanos en EEUU

Tres sujetos que fueron detenidos por la muerte de Malcolm Latif Shabazz, nieto del activista social Malcom “X”, recuperaron su libertad tras demostrarse que la investigación presentaba varias inconsistencias.

“¿Qué queremos? justicia para Malcolm Latif”, gritaban en una manifestación de un grupo de estadounidenses en Paseo de la Reforma de la Ciudad de México.

El 9 de mayo de 2013, Malcolm-Latif Shabazz murió durante una presunta agresión en un bar de Garibaldi.

La víctima era nieto de Malcom “X”, activista social, quien junto con Martin Luther King, luchó por los derechos de los afroamericanos en Estados Unidos.

La noticia acaparó los titulares de los principales medios de comunicación nacionales y extranjeros.

Tres días después, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX) aseguró que había resuelto el caso.

De acuerdo con el entonces procurador Rodolfo Ríos Garza, el 9 mayo de 2013, Malcolm-Latif Shabazz y un amigo de nombre Miguel Suárez Meza acudieron al bar “Palace Club”, ubicado frente a la Plaza de Garibaldi.

Que al negarse a pagar una cuenta de 12 mil pesos, Malcolm fue agredido por los encargados del antro.

Rodolfo Ríos Garza, en ese entonces procurador General de Justicia de la Ciudad de México, informó: “Al no llegar a un acuerdo el hoy occiso fue golpeado y su acompañante amenazado y despojado de sus pertenencias en el interior del inmueble”.

De acuerdo con el procurador, Malcolm, gravemente herido fue abandonado en la calle. Más tarde murió en el Hospital de Balbuena.

Policías de Investigación obtuvieron una supuesta versión de residentes que escucharon a unos meseros decir que agredieron a un norteamericano.

Sin un señalamiento directo, fueron detenidos los empleados David Hernández Cruz y Manuel Alejandro Pérez de Jesús.

Un juez los sentenció a 27 años y 6 meses de prisión por los delitos de homicidio calificado y robo agravado.

El 9 de octubre de 2014, un año y cinco meses después, fue detenido Juan Dircio Guzmán, capitán de meseros. Fue consignado y sentenciado a la misma pena.

Ángel David Arellano Mariscal, abogado, comentó: “Se puede establecer que los hechos no ocurrieron como lo dice la Procuraduría y que evidentemente hubo un grave error judicial”.

Hoy los tres empleados del bar, acusados de homicidio por la entonces Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México se encuentran libres.

En el expediente -que contiene las diligencias, declaraciones ministeriales y dictámenes periciales- se puede establecer que Malcolm Latif Shabazz no murió por una golpiza; falleció por las lesiones al caer de una altura considerable.

De acuerdo con los testimonios de varios empleados, que no fueron tomados en cuenta por el Ministerio Público, el estadounidense escapó por la azotea del bar para no pagar la cuenta.

Testigos afirmaron que Malcolm llegó hasta el estacionamiento y al saltar hacia la calle se lesionó.

El dictamen de la necropsia reveló que todas las lesiones se ubicaron en el costado derecho. La mayoría son escoriaciones y un golpe en el cabeza, éste último como causa de muerte.

El doctor en Ciencias Forenses, Salvador Miguel Martínez, analizó los dictámenes periciales realizados por la entonces Procuraduría capitalina; contradice la versión oficial.

Éstas lesiones son compatibles con aquellas personas que sufren una precipitación por arriba de su plano o estatura y como está focalizado de un sólo lado, es imposible que tres personas, dos o más me golpeen y no tenga lesiones en otra parte del cuerpo”, explicó Salvador Miguel Martínez.

Es una fotografía tomada el día 10 de mayo de 2013, es el sitio donde supuestamente fueron agredidos Malcolm Latif y su acompañante. Las botellas y sillas se encuentran en su lugar, no hay indicios de violencia.

El perito químico Marcos Gutiérrez Nute realizó la aplicación del reactivo de luminol para detectar sangre de la víctima y no se localizó rastro alguno.

El resultado reforzó la hipótesis de que Malcolm no fue agredido en el interior del bar.

Los exámenes químico-toxicológicos indicaron que el estadounidense ingirió grandes cantidades de alcohol.

El entonces Procurador negó que hubiera consumido drogas.

No se desprende que haya consumido algún tipo de droga”, declaró Rodolfo Ríos Garza.

Sin embargo, en el expediente fue hallado un dictamen que indica la presencia de una droga psicotrópica conocida como benzodiacepina en la sangre Malcolm.

Por estas graves inconsistencias, el abogado Ángel David Arellano Mariscal promovió un amparo federal en favor de Juan Dircio Guzmán.

El pasado 8 de noviembre, el capitán de meseros recobró la libertad.

El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito determinó que se vulneraron los derechos fundamentales de seguridad jurídica, legalidad y presunción de inocencia.

Meses antes fue liberado el mesero Manuel Alejandro Pérez de Jesús.

El pasado 23 enero, David Hernández Cruz, el último de los coacusados, recuperó la libertad después de permanecer 6 años y 8 meses preso.

David Hernández Cruz, empleado del bar “Palace Club”, contó: “Perdí a mi familia, lo poco que tenía me quede sin nada”.

Los magistrados que otorgaron la libertad argumentaron que no hay pruebas suficientes de que el deceso de Malcolm Latif fue ocasionado por los golpes de los empleados. No hay señalamientos directos en ese sentido.

David Hernández Cruz, exempleado del bar “Palace Club”, relató: “Yo ese día no me tocó estar en el negocio, yo andaba repartiendo tarjetas. Me tuvieron dos días y el día 12 de mayo como a las 6:00 de la tarde hacen mi traslado al reclusorio oriente. No me presentaron con ningún abogado.

Los jueces cuestionaron la actuación del Ministerio Público:

Incluso se advierte que existe una versión de que el hoy occiso se cayó de la azotea, lo que demerita la postura ministerial imputada”, señala el texto.

De acuerdo con el abogado Ángel David Arellano Mariscal, la entonces Procuraduría de Justicia capitalina fabricó culpables.

Ángel David Arellano Mariscal, abogado, expresó: “Pagadores, alguien tenía que ser responsable, no hicieron una investigación buscando la verdad, lo que hicieron fue inculpar a alguien para poder cubrir una exigencia política o social”.

Juan Dircio Guzmán estuvo en la cárcel 5 años un mes y 7 días por un crimen que no cometió.

Juan Dircio Guzmán, exempleado del bar “Palace Club”, explicó: “Es difícil conseguir trabajo cuando ya tiene uno antecedentes, inclusive los vecinos, los supuestos amigos que uno tenía antes de esto ya lo ven a uno como animal raro”.

A sus 59 años no consigue trabajo, vive de la venta de cuadros y artesanías que aprendió a fabricar en prisión.

David Hernández tiene 39 años, la cárcel le dejó graves secuelas.

Nos hicieron un daño psicológico, perdimos años de nuestra vida ahí encerrados”, expresó el exempleado.

La defensa de los afectados busca que la ahora Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) ofrezca una disculpa pública y repare el daño causado.

Con información de Santos Mondragon.

ramg