Lo que son las cosas, durante 17 largos años, fujimoristas y nacionalistas de Ollanta Humala fueron enemigos irreconciliables y rivales en dos campañas presidenciales.
Hoy, con Humala y su esposa en prisión, Kenji Fujimori, el congresista y benjamín del clan Fujimori, sorprendió a propios y extraños al visitar en su celda al expresidente Humala. Es momento, dijo, de curar heridas. En las últimas horas volvió a visitarlo.
“Yo sé lo que es tener un pariente, un familiar en prisión”, dijo Kenji Fujimori.
El menor de los Fujimori le llevó comida y frazadas. Dijo que no le guardaba rencor y olvidó las frases incendiarias del expresidente Humala contra su padre y el fujimorismo.
“Hay que dejar de lado el odio, el rencor uno no puede vivir odiando de por vida”, agregó.
Su gesto de derribar muros y construir puentes fue aplaudido por muchos.
Para el congresista Roberto Vieira “lo que ha hecho Kenji Fujimori es un, marca un hito dentro de la política peruana…por qué, porque no necesitamos vivir enfrentados”.
Sin embargo, en el partido fujimorista no todos están de acuerdo con este simbólico abrazo de paz.
“La verdad, yo no tengo ningún motivo para visitar al presidente Ollanta Humala”, expresó Úrsula Letona, congresista fujimorista.
El partido nacionalista no es la excepción. El recelo y la desconfianza son evidentes.
“Yo no estoy completamente segura si esta visita ha sido en buena intención, en buena lid”, señalo por su parte Cinthya Montes, exjefa de prensa de Ollanta Humala.
Humala, que comparte prisión con Alberto Fujimori en la base policial del Fundo Barbadillo, en las afueras de Lima, alistó con sus abogados la estrategia legal de su apelación en segunda instancia. Busca recuperar su libertad y la de su esposa.
El trámite judicial para sacarlo de prisión se cumplió este martes.
“No debe pasar en total más de una semana aproximadamente para que la sala resuelva, previo debate”, explicó Julio Espinoza, abogado de Ollanta Humala.
Ochenta y siete por ciento de los peruanos, según una reciente encuesta, está de acuerdo que el expresidente Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia sigan en prisión. Apenas un once por ciento está en desacuerdo.
Por supuesto, la última palabra la tiene el poder judicial.
Con información de Ricardo Burgos, corresponsal de Noticieros Televisa.
AAE
