Cansados de los altos índices de violencia, en un acto desesperado, un grupo de taxistas decidió tomar la justicia por sus propias manos y linchó a dos jóvenes guatemaltecos extorsionadores, en el departamento de Puerto Barrios, Izabal, una comunidad a 296 kilómetros al nororiente de la capital guatemalteca.
Todo inició a las ocho de la noche, cuando tres jóvenes asesinaron a balazos a un conductor de taxi por no haber cancelado su cuota de extorsión, de 15 dólares. Los conductores enardecidos por esta situación, persiguieron por las calles de la comunidad a los asesinos, lo que facilitó la tarea de las autoridades para capturarlos.
No satisfechos con las capturas, desconfiando en la justicia guatemalteca, al menos 700 pobladores, liderados e incentivados por los taxistas sacaron de la subestación de la Policía Nacional Civil, por la fuerza, a dos de los presuntos homicidas, golpeándolos y quemándolos vivos.
Esta situación no pudo ser evitada por los 50 elementos policiales, quienes eran superados por la turba, que grabó, celebró y advirtió que continuarán con estas medidas de hecho a todo aquél que decida delinquir.
En conferencia de prensa, las autoridades policiales y de la Alcaldía de Izabal, indicaron que se iniciará de oficio una investigación, porque se acabó con la vida de dos personas y ellos se vieron imposibilitados en brindarles ayuda. Los dos jóvenes quemados eran Víctor Armando Reyes Chachagua de 18 y Oliver Francisco Gonzales, de 19 años. El padre de uno de ellos, con machete en mano, trató de impedir que quemaran a su hijo vivo, pero esto no fue suficiente y tuvo que huir del lugar para resguardar su vida.
Para algunos expertos, tomar la justicia por propia mano se está convirtiendo en una costumbre por parte de los ciudadanos que no se sienten respaldados por las autoridades al resguardo de la comunidad, ni por los órganos de justicia en este país centroamericano, que según datos del Instituto Nacional de Estadística el 97 por ciento de los delitos quedan impunes.
Varios municipios del territorio nacional han decidido organizarse y cuidar sus comunidades, realizando patrullajes nocturnos, para evitar que grupos de antisociales, el crimen organizado o las pandillas tomen el control de los lugares, rompiendo con la paz de los lugareños, quienes aplaudieron en las redes sociales estos actos.
Con información de Lisa María Lou, Noticieros Televisa
AAE