El Gobierno de Guatemala envió una nueva nota diplomática a Estados Unidos para que investigue y aclare la muerte del menor inmigrante Felipe Gómez, informó este jueves una fuente oficial.
La ministra guatemalteca de Relaciones Exteriores, Sandra Jovel, explicó que la nota fue dirigida al secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, tal como se hizo también en el caso de Jakelin Caal, de 8 años, fallecida el pasado 8 de diciembre cuando se encontraba bajo protección de la Patrulla Fronteriza.
Se pide a Estados Unidos que nos puedan apoyar con todas las investigaciones y aclaraciones respectivas”, dijo la canciller.
Gómez, de 8 años, originario del municipio de Nentón, del departamento noroccidental de Huehuetenango, fronterizo con México, murió la pasada Navidad, supuestamente de una fiebre común, cuando estaba en poder de las autoridades estadounidenses.
Jovel agregó que el Gobierno guatemalteco está dando todo el apoyo a los padres del niño inmigrante fallecido.
La Cancillería también anunció hoy que el cónsul en Del Río (Texas), Tekandi Paniagua, ya se presentó a la morgue para pedir la autopsia, ya que es “muy importante para llevar a cabo la investigación y concretar la causa de muerte” del menor.
Felipe Gómez perdió la vida en Estados Unidos. (https://www.prensalibre.com)
Este miércoles, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, pidió una investigación tras la muerte de dos niños guatemaltecos que estaban bajo custodia de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.
Urge investigación para delimitar responsabilidades”, escribió Almagro en su cuenta de Twitter, al expresar sus condolencias a las familias de los niños Felipe Gómez y Jakelin Caal.
El día de Nochebuena, Felipe Gómez, de ocho años, murió en un hospital del estado de Nuevo México por causas que aún se desconocen y tras permanecer bajo supervisión de la policía fronteriza durante más de una semana. Gómez había sido detenido por cruzar ilegalmente la frontera con México.
Por su parte, Jakelin Caal, de apenas siete años y quien fue retenida junto a su padre luego de entrar ilegalmente a Estados Unidos desde México, falleció el pasado 8 de diciembre en un hospital de El Paso (Texas).
“Es esencial (la) protección de derechos de todos los niños –sin perjuicio de su status migratorio-, ellos son lo más importante y los más vulnerables”, agregó Almagro.
Las autoridades estadounidenses anunciaron el miércoles que han comenzado a someter a exámenes médicos a todos los menores inmigrantes bajo su custodia.
Con información de EFE
AAE
