Los gigantescos cruceros que hacen escala en Venecia ya no podrán pasar frente a la emblemática Plaza de San Marco y en cambio serán desviados a un puerto industrial vecino a la ciudad de los canales, se informó el miércoles.
El acuerdo celebrado entre el gobierno italiano y la municipalidad de Venecia, el más reciente en una polémica de años y al que falta ultimar los detalles, busca un equilibrio entre el frágil ecosistema veneciano y las necesidades del turismo y los empleos marítimos.
El ministro de Transportes, Graziano Delrio, dijo que los cruceros de más de 55 mil toneladas deben atracar en el puerto de Marghera y evitar el tránsito por el canal Giudecca, una de las vías acuáticas principales de la ciudad que desagota en la cuenca de San Marco.
Los grupos ambientalistas rechazan el acuerdo porque permite a los contaminantes cruceros seguir entrando a la laguna.
Con información de AP
LSH
