Numerosos astrónomos y aficionados tuvieron la suerte de observar este domingo 21 de junio en el cielo de África del Este, en pleno solsticio de verano, un eclipse solar excepcional del tipo “Anillo de fuego”.
Este fenómeno astronómico, que sólo se produce una o dos veces al año, empezó poco después de la salida del sol en el centro del continente africano, atravesando la República Democrática del Congo, Sudán del Sur y el norte de Etiopía. Luego avanzó hacia Asia y terminó en el océano Pacífico, en el sur de la isla de Guam, a la 09:32 GMT.
En este tipo de eclipse, la Luna pasa por delante del Sol, en alineación con la Tierra y lo oculta parcialmente, pero deja visible un anillo del astro rey, conocido como “círculo de fuego”.
En Nairobi, la capital de Kenia, y Hong Kong la gente pudo observar un eclipse parcial debido a que las nubes taparon el momento preciso en que la Luna tenía que ocultar al Sol.
Sólo el 2% de la superficie de la Tierra está afectado por la fase total del eclipse, y es lo que lo convierte en un fenómeno excepcional.
Es menos espectacular que un eclipse total, donde el espacio que ocupa la Luna en el cielo corresponde exactamente al espacio que ocupa el Sol y provoca la noche.
El recorrido de este eclipse de anillo de fuego fue largo, porque pudo verse en 14 países de dos continentes, pero también fue muy estrecho y su punto más ancho ocurrió en África Occidental,
El eclipse anular terminará a las 08:32 GMT en un punto del océano Pacífico al sureste de la isla de Guam (EEUU) y el parcial una hora después al este de Filipinas.
El fenómeno de este domingo fue especial, pues coincidió con el solsticio de verano, algo que en este siglo solo sucederá este año y el 21 de junio de 2039, cuando podrá verse con mayor nitidez en Alaska (EE.UU), zonas del norte de Canadá, de Groenlandia y de los países nórdicos.
Con información de AFP y EFE.
RAMG